926 detenidos y 102.000 denuncias por incumplir el estado de alarma
Marlaska recuerda que las actitudes insolidarias son condenadas con cuatro meses de prisión como en un caso de Tenerife
Desde que entró en vigor el real decreto del estado de alarma, hace diez días, se han producido 926 detenciones y se han realizado 102.000 denuncias por desobediencia al régimen de confinamiento que regula la normativa establecida para contener la expansión del coronavirus el pasado 14 de marzo. Son los datos que ha aportado este martes en rueda de prensa el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que ha comenzado su comparecencia lamentando las dos últimas muertes por la Covid-19 entre miembros de su cartera. Se trata de un guardia civil, Jose Ántonio, de 47 años y destinado en Aranjuez. Es el tercero que fallece por la enfermedad dentro del instituto armado. Marlaska también ha lamentado la muerte de una reclusa en la prisión de Estremera, también provocada por el coronavirus.
Marlaska ha destacado que, pese a que a lo largo de la jornada de este martes se han producido 130 nuevas detenciones y realizado más de 20.000 nuevas denuncias, siguen siendo mayoría las personas que asumen las normas del real decreto y tienen un comportamiento ejemplar. No obstante, el ministro ha recordado que se ha producido ya la primera condena por desobediencia a la autoridad en relación con el cumplimiento del decreto. Se trata de una persona condenada a cuatro meses de prisión por un juzgado de Santa Cruz de Tenerife. “Lo que viene a demostrar que las penas por las actitudes insolidarias pueden ser de hasta cuatro meses de prisión”.
¿Protecciones para todos?
Pese a las reiteradas críticas que se vienen produciendo desde las asociaciones de guardias civiles por la falta de material de protección y las sucesivas muertes o bajas por enfermedad de sus agentes, Marlaska ha asegurado que todos los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado cuentan con las medidas de protección necesarias para el desarrollo de sus funciones, y ha afirmado que se recibirán nuevas partidas de material de protección para que siga siendo así. “Tienen los medios adecuados para prestar el servicio y los seguirán teniendo, y estamos consiguiendo partidas importantes de los elementos de protección”. En todo caso, el ministro no respondió a la pregunta de si el último agente fallecido por el coronavirus había tenido acceso o no a esos materiales en el desarrollo de sus funciones.
El ministro, al igual que los responsables policiales, ha recordado las “decenas” de ciberataques que vienen siendo detectados. Y, en relación con la posible liberación de las personas que se encuentran en los centros de internamiento de extranjeros (CIE), el ministro ha explicado que tendrá que estudiarse “cada caso de manera individualizada”.
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