Tivoli Marina Vilamoura, atardecer ‘chill out’ en el Algarve portugués

Al poco de adquirir la cadena española NH y la portuguesa Tivoli, el grupo tailandés Minor quiso trasplantar su marca Anantara a los hoteles donde el refinamiento de un masaje y un baño oriental constituyeran el símbolo del lujo extremo que aterrizaba en Europa desde Asia. En el Algarve hizo hervir el té de la hospitalidad y el bienestar en el antiguo Tivoli Victoria (rebautizado como Anantara Vilamoura Algarve) y dejó su gemelo Tivoli Marina como subsidiario de las exquisiteces ofrecidas por el primero a una clientela también selecta, pero más mirada por el bolsillo y la jovialidad nocturna.

Este Marina es un hotel más paquetón y estruendoso, pero también más divertido. Su nombre anuncia las vistas que prodiga al océano, por un lado, y a la marina de Vilamoura, por el otro. Hay habitaciones suficientes para elegir el color de la panorámica y de la ambientación interior.

Renovado por completo hace cuatro años, sus instalaciones se han abierto a las familias con ganas de esponjarse en estos tiempos de covid, exigentes con la vida al aire libre, el chapoteo en piscinas infinitas o festejar la noche en espacios abiertos con escenografía botánica y luminotécnica. El spa, sin los lujos del vecino Anantara, recrea paisajes exóticos de Tailandia con sus muebles de madera y sus terapias holísticas. Los niños, mientras tanto, gritan a gusto en un Kids Club con piscina propia, menús golosos y servicio de canguro.

La oferta gastronómica es tan amplia como sus instalaciones de ocio. El restaurante Chilli abre su bufé a las familias, el Oregano ofrece cocina mediterránea en un ambiente de carpa y el Pepper’s Steakhouse le da a la carne en todas sus versiones. También se puede picotear en el bar D’Azur, junto a la piscina; en el Argo Cocktail Bar a horas nocturnas, o comer en la habitación, servicio que ha aumentado sus requerimientos con la pandemia.

Pero el plato fuerte del resort es el club de playa Purobeach, un espectáculo como todos los de esta marca nacida en Mallorca para la juventud más predispuesta al chill out estival. El restaurante con terraza en la playa es excepcional en atractivos gastro —cocina M3: Melbourne, Miami y Marrakech— y el atardecer se celebra aquí a ritmo del DJ residente, cócteles y masajes sobre la espina dorsal.