Cangrejos por kilos en Kep

Dicen que una visita a la ciudad de Kep, al sur de Camboya, no está completa sin probar unos cangrejos. A diez minutos caminando desde la playa se pueden comprar recién sacados del agua. Los moluscos se encuentran vivos en unas cestas de bambú en el agua y las vendedoras se adentran a recogerlos cuando llega un comprador. Según el tamaño y las habilidades negociadoras del viajero cuestan entre dos y cuatro euros el kilo más una pequeña comisión para comerlos cocinados. El estilo más popular es prepararlos con pimienta verde, como es común en el vecino pueblo de Kampot. En los puestos del mercado venden arroz y bebidas para acompañar, así como gambas o pescado para aquellos que lo prefieran.

El pueblo de Kep se encuentra a pocos kilómetros de la frontera con Vietnam y fue fundado en 1908 durante la época colonial francesa. Era un destino popular de vacaciones hasta la llegada de los jemeres rojos, poco antes de que tomaran el país en 1975. Muchas de sus villas, la mayoría de ellas francesas, fueron abandonadas y el lugar está siendo redescubierto ahora por el turismo. Sus playas, en su mayoría manglares, no son de arena blanca como en la vecina Sihanoukville, lo que la mantiene a salvo de grandes aglomeraciones de turistas.

El municipio se encuentra a una hora de la vecina Kampot y a cuatro horas de la capital, Phnom Penh. La carretera está en buen estado para llegar con una moto alquilada y hay varias frecuencias diarias de autobús que llegan hasta aquí desde el mercado central o el Estadio Olímpico de Phnom Penh, entre las 7.00 y las 15.00. Además, el tren que conecta la capital con Sihanoukville realiza una parada en Chang Eur Station, a siete kilómetros de la ciudad de Kep.

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