Una mañana en Baqueira Beret

Las nuevas pistas de la estación leridana de Baqueira Beret aumentan, y mucho, el nivel técnico de la estación. Son antiguos itinerarios en montaña abierta convertidos ahora en descensos señalizados con categoría de máxima dificultad. No se pisarán constantemente. Un especialista las bajará a primera hora del día y decidirá si se abren o no en función de su estado. Los esquiadores deben respetar esas indicaciones por su seguridad. El recorrido propuesto a continuación se ha realizado teniendo en cuenta esas señales y las mejores horas del día para disfrutar de la nieve ideal en cada zona.

10.00 A seis grados bajo cero

Hace ya mucho rato que el sol calienta las laderas sur del Cap de Baqueira aunque la temperatura no sube de los seis grados bajo cero. El sol, el frío y el trabajo nocturno de las máquinas han dejado la nieve en condiciones óptimas para esquiar. La pista Muguet, negra, antiguo itinerario convertido ahora en una de las nuevas pistas, parte hacia Argulls entre sombras y una ‘pala’ de fuerte inclinación que desemboca en el valle después de un largo recorrido a media ladera. Como no está pisada, recorrerla es un placer reservado a expertos. Su gemela Manaud, igualmente negra, es mejor opción en estas condiciones. Ambas conducen al mismo punto y proporcionan sensaciones similares: mucha pendiente, grandes extensiones de nieve virgen y un esquí sin masificación. Tomamos el telesilla Manaud, conocido popularmente como ‘el microondas’ porque el sol calienta la espalda, para volver al Cap de Baqueira

10.30 Para expertos

Cambiamos de orientación y avanzamos ahora en sentido contrario, hacia la cara norte. Buscamos el comienzo de otro nuevo descenso cuyo nombre pone la piel de gallina a quienes lo conocen, la Pasarell, otro antiguo itinerario transformado en pista. La encontramos a medio camino de la Luis Arias y nos asomamos. Desde aquí es absolutamente impresionante; un primer giro conduce a un vallecito colgado en la montaña y después se endereza para pasar por una canal estrecha entre árboles y roca que obliga a giros cortos hasta que la ladera se abre. No está pisada ni parece que se vaya a hacer. Es un recorrido solo para muy expertos, por no decir profesionales.

11.00  A Beret a toda pastilla

La estación tiene varios sectores. Para desplazarse de Baqueira a Beret los esquiadores deben tomar un remonte. Y aquí está la estrella de las inversiones de este año, el telesilla Jesús Serra. Sustituye al antiguo Vista Beret, reduce el tiempo de viaje a la mitad (6 minutos) y elimina en la parte alta un cruce peligroso con los esquiadores que bajaban de cotas más altas; ¡atención al desembarque!, es algo incómodo aunque esto tal vez dependa de la cantidad de nieve. Desde aquí parten hasta siete pistas para bajar al núcleo de servicios de Beret, tres de ellas nuevas este año y todas fáciles. Probamos la que lleva por nombre Ta Beret 4. Es una gozada, ancha y fácil, con la nieve fabulosa porque a esta hora de la mañana el sol aún no la ha transformado. Al haber tantas opciones para bajar los esquiadores se reparten y la pista está vacía. Toda esta zona es muy adecuada para iniciarse también en el free-ride.

11.30 Un café entre la nieve

La cima del Blanhiblar, 2.245 metros, no es solo uno de los mejores miradores de la estación, también el lugar ideal para hacer una pausa en su parrec (bar al aire libre) y retomar fuerzas antes de afrontar otra de las novedades del año, la pista Pèira Arroja. Su orientación sur aconseja recorrerla antes de que avance el día y se ablande la nieve. Si no está pisada, exige técnica y fuerza en los giros y en el flanqueo final que devuelve a pie de la montaña, a pesar de que su nivel de dificultad es medio. Si está preparada por las máquinas es fácil y divertida porque tiene varios cambios de dirección y de inclinación. Vale la pena recorrerla para salirse de las pistas más concurridas y para disfrutar del sol que nos dará de cara todo el rato si el día está despejado.

En Beret, para probar otro de los nuevos remontes, tomamos un telesquí de tipo ‘ancla’ para dos personas. Discurre paralelo al estadio de competición de Beret y se ha construido para que lo utilicen sobre todo los corredores. De ese modo se evita que se mezclen con el resto de clientes de usuarios al subir y sobre todo al bajar porque unos y otros llevan ritmos y velocidades muy diferentes. Aunque solo tarda cinco minutos en completar el recorrido se hace monótono y algo cansado como todos los arrastres; el público general encontrará más placentero y más rápido utilizar el telesilla desembragable Dera Reina que en sólo 7 minutos lleva a la cima a seis esquiadores sentados en cada silla.

13.00. Una montaña para estrenar

El Saumet es una zona completamente nueva de la estación hasta ahora solo transitada por esquiadores de montaña y, eventualmente, por rebecos, ardillas y resto de fauna local. Es la gran estrella de la temporada. En general es una montaña muy pendiente orientada mitad al norte y mitad al sur. Aquí se han trazado cuatro pistas, de momento; tres negras: Sanglièr (976 metros de longitud), Craba (1.534 metros) y Orri de Tredòs (1.855 metros) y una roja, Saumet (1.280 metros). Sin pisar, las negras solo son aptas para expertos.

Para subir hay que tomar el telesquí Saumet, también nuevo, que en 8 minutos lleva al punto más alto. Antes de bajar hay que disfrutar del panorama porque es el mejor que ofrece la estación. Hacia el sur, las canales impresionantes de nieve y roca que bajan del Cap de Baqueira y que, aunque parezca imposible, se pueden esquiar por itinerarios vertiginosos como Marconi o Escornacrabes; hacia el oeste, una panorámica amplísima de los Pirineos que incluye multitud de picos de más de tres mil metros: Tempestades, Aneto, Coronas, Perdiguero, Posets, La Munia y otros gigantes de roca y hielo de Cataluña, Aragón y Francia. Y todo el valle de Arán hasta Viella.

Como las negras están cerradas este día, bajamos por la roja. Hay varios trazados que incluyen zonas fáciles y otras más inclinadas, un par de cruces con el telesquí de subida y algún paso más estrecho para terminar. Quienes prefieran bajar más cómodamente pueden tomar un camino fácil en la parte final. El Saumet, con sus descensos exigentes, sube el nivel técnico de la estación y le proporciona pistas de alto nivel para esquiadores exigentes. Se intuye que hace falta mucha nieve y poco viento para sacarle el máximo partido a esta espléndida zona nueva de Baqueira Beret.

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