El oso pardo revive en la cordillera Cantábrica. Se estima que ya hay unos 330 ejemplares autóctonos en la zona, cuatro veces más que hace 30 años. El fotógrafo Romain Guerin ha dedicado dos años a recorrer estas montañas para retratar su fauna, en especial al formidable oso. Ha tenido que ser muy paciente para poder observar a este gran mamífero.
"Llevo más de dos años dedicando mi vida a explorar, fotografiar, filmar y escribir sobre el mundo salvaje y libre en el que viven los últimos grandes depredadores de Europa Occidental. Encontrar una huella es siempre excitante, la señal de andar tras los pasos del oso", dice el fotógrafo Romain Guerin. En la imagen, marca del pie de un macho adulto.Romain GuerinEl parque natural de Somiedo, en Asturias, es una joya en el corazón de la cordillera Cantábrica. Con elementos de flora y fauna únicos, alberga además una asombrosa biodiversidad: desde el diminuto reyezuelo listado hasta el oso pardo, uno de los mamíferos más grandes de Europa. La osa fotografiada deambula entre árboles frutales. Si bien es una especie omnívora, el 80% de su alimentación es vegetal: bayas, fruta, hojas…Romain Guerin"Adentrarme en la intimidad de todos estos animales y, en especial, en la del oso, supuso un desafío en el que la frustración y la perseverancia jugaban un pulso constante. Si la dificultad de dar con el oso por la cordillera es considerable; divisarlo es formidable. Más si es con los primeros rayos de sol".Romain Guerin"Pasé meses sobre el terreno con muy pocos resultados satisfactorios. A menudo volvía a casa con la tarjeta de memoria vacía tras horas de lluvia incesante. Con la densidad de habitantes más baja de Asturias, Somiedo es un refugio para la fauna. Así, de repente, un grupo de ciervos asoma por el perfil de una ladera", dice el fotógrafo.Romain Guerin"Tuve que simplificar mis necesidades, dejar a un lado orden y hábitos humanos. Vivir con las estaciones y aprender de los animales, de sus ritmos y sus ciclos, sincronizarme con ellos, pasar inadvertido, estar sin desentonar, como uno más. Discreto como el gato montés o “fantasma del bosque”, el único y esquivo felino salvaje de la cordillera Cantábrica".Romain Guerin"Este continuo aprender es lo que me lleva al monte cada día. Dedicar tanto tiempo y trabajo me ha permitido ser espectador de escenas increíbles pocas veces documentadas. En la foto, un ejemplar busca comida tras estar un buen rato comiendo avellanas", explica Guerin.Romain GuerinLos valles y montañas de Somiedo ofrecen escenarios espectaculares, con su juego de luz, nubes y cumbres nevadas.Romain GuerinLas fuertes pendientes no son un obstáculo para el oso, que se desenvuelve con facilidad por las zonas más abruptas de la cordillera Cantábrica.Romain Guerin
