El hijo pequeño de Mick Jagger, una copia de su padre

No hay duda de que Mick Jagger ha sabido transmitir sus genes a cada uno de sus ocho hijos. Prueba de ello ha sido la fotografía que ha publicado su pareja, la bailarina Melanie Hamrick, del más pequeño, Deveraux, de solo dos años, en su Instagram. Sobre un escenario vacío y sin mirar a la cámara, Deveraux luce la misma melena al viento y los mismos labios tan característicos de Mick Jagger. Un increíble parecido que no ha pasado desapercibido entre los internautas. "Mini Mick", escribió una persona. "Es un clon de su papá, como Georgia May”, escribió otra refiriéndose a otra de las hijas del cantante, de 27 años. "¡Esos genes son fuertes!", añadió un tercero.

Nacido en diciembre de 2016, Deveraux es el octavo hijo de Jagger. El intérprete de Satisfaction tiene cuatro hijos y cuatro hijas de cinco mujeres distintas. Su primera hija, Karis Hunt Jagger, nació en 1970 de su relación con Marsha Hunt. Jagger solo se ha casado una vez, con Bianca Jagger, que fue su esposa de 1971 a 1978 y con ella tuvo a Jade Sheena Jezebel Jagger (en 1971). Luego mantuvo una relación de más de 20 años con la modelo Jerry Hall, ahora casada con Ruphert Murdoch. De esa relación nacieron cuatro hijos: Elizabeth Scarlett Jagger (1984), James Leroy Augustin Jagger (1985), Georgia May Ayeesha Jagger (1992) y Gabriel Luke Beauregard Jagger (1997). En 1999 reconocía la paternidad tras una prueba de ADN de su hijo Lucas Maurice Morad Jagger, fruto de una fugaz relación con la modelo brasileña Luciana Gimenez.

En julio de 2016, el cantante sorprendió a todos cuando reveló que su novia, la bailarina Melanie Hamrick, entonces de 29 años, estaba embarazada del que sería el octavo hijo para el músico y el primero para ella. Jagger y Hamrick comenzaron a salir en 2014, pocos meses después del suicidio de la diseñadora L’Wren Scott, la que fuera su novia durante 13 años.

Mick Jagger y el resto de los Rolling Stones ( Keith Richards, 75, Charlie Watts, 78 y Ronnie Wood, 72) se encuentran actualmente de gira por Norteamérica, que arrancó el pasado 21 de junio en Chicago. Una gira que tuvo que ser cancelada por la operación de corazón a la que se sometió el líder de la banda hace apenas dos meses en Nueva York y por la que tuvieron que reemplazarle una válvula cardíaca defectuosa.

Esto ocurrió a primeros de abril y, tras un reposo obligado por los médicos, el músico se volvió a mostrar en plena forma. Solo unas semanas después de la intervención, Jagger se dejó ver con buen aspecto y paseando por un parque de la ciudad. Además, a mediados de mayo ya mostraba su intención de llegar a tiempo y en buena forma a la gira. En un vídeo que publicaba en su cuenta de Twitter se le veía saltando y ensayando algunos de sus míticos bailes frente a un espejo con toda su energía. La misma que está derrochando en cada concierto que, según reveló en una reciente entrevista, ahora va a tomarse con más calma. "Con pasar tres o cuatro meses al año en la carretera me parece un equilibrio lógico", dijo Jagger a principios de junio en una entrevista con una radio canadiense.

Sus amigos, sin embargo, bromean con que aún tienen que pararle los pies. “Oh, él es aún más difícil de detener ahora. Está en muy buena forma, se reserva tres horas al día para hacer ejercicio y eso le ha venido muy bien”, dijo hace unos días su compañero de banda Ronnie Wood al diario The Sun.