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Kate Middleton, la pacificadora entre los príncipes Guillermo y Enrique

La duquesa de Cambridge celebra este lunes su octavo aniversario de bodas ajena a una supuesta infidelidad de su esposo y afianzada en su papel en la casa real británica

La duquesa de Cambridge en Westminster Abbey, el pasado 25 de abril.
La duquesa de Cambridge en Westminster Abbey, el pasado 25 de abril.WPA Pool (Getty Images)
Mábel Galaz
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Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra celebran este lunes su octavo aniversario de matrimonio. Lo hacen físicamente separados —ella está en Londres y él de viaje oficial en Nueva Zelanda— pero tan unidos como siempre. La duquesa de Cambridge está muy segura de su relación por eso se ha mantenido al margen de las noticias que apuntaban a una affaire de su esposo con una de sus mejores amigas. La reacción ha sido rotunda por parte de príncipe que ha anunciado medidas legales ante tamaño infundio.

En estos ocho años en la casa real británica, Kate Middleton se ha convertido en una figura fundamental y muy valorada por la gente en las encuestas de popularidad. Pero además de lo que se palpa en la calle en los actos a los que acude, también es decisiva en lo que sucede tras los muros de los palacios. Varios medios británicos han asegurado estos días, citando fuentes próximas a los Windsor, que la duquesa de Cambridge está siendo fundamental para calmar las tensas relaciones que desde hace meses mantienen los dos hijos de Diana de Gales, Guillermo y Enrique de Inglaterra.

Al parecer, ninguno de los hermanos ha estado dispuesto a dar su brazo a torcer. Pero según apunta The Express, ha sido Kate Middleton quien, al fin, ha logrado el primer acercamiento entre ambos. Ocurrió en el día de Pascua en Windsor cuando la duquesa convenció a su marido de que se acercaran a visitar a Meghan Markle en su nueva casa y se interesaran por ella, que vive sus últimos días de embarazo.

Middleton, según informa The Express, aprovechó la ocasión para hablar con Enrique y mediar en el conflicto ya que los dos hermanos, al parecer, son muy cabezotas y ninguno está dispuesto a dar el primer paso. Una fuente también ha revelado que “la duquesa y Enrique han desarrollado un vínculo muy estrecho a lo largo de los años" y que “Kate es muy consciente de lo importante que es que los dos hermanos se lleven bien, no solo por apariencia, sino por su responsabilidad colectiva con la monarquía en general". Parece que las gestiones van por buen camino ya que Middleton mantiene desde siempre una excelente relación con su cuñado.

Desde Nueva Zelanda, el príncipe Guillermo también ha hecho algún gesto al menos de cara al exterior al confesar que estaba pendiente del teléfono por el "inminente" parto de su cuñada Meghan Markle. Todo lo que rodea la llegada del nuevo bebé real se lleva con sigilo por deseo de sus padres , que quieren vivir su nacimiento en "privado".

Markle, de 37 años, está dispuesta a seguir los pasos de la reina al dar a luz con la asistencia de una partera en Frogmore Cottage, el nuevo hogar que comparte con el príncipe Enrique. La reina nació en la casa de Mayfair de sus abuelos y dio a luz a sus cuatro hijos en el palacio de Buckingham o en Clarence House. Sin embargo, los médicos que atienden a Markle consideran que al tratarse de una mujer mayor de 35 años debería tener a su bebé en un hospital, ya que a esa edad es más probable una cesárea. Un amigo de la duquesa ha desvelado que la intención de esta es parir en casa, ya que goza de buena salud y desea la máxima intimidad, la que le puede dar su casa en el campo. Desde hace días hay una ambulancia aparcada cerca de la propiedad y un helicóptero sobrevuela la zona.

Kate Middleton apoya a su cuñada en estos momentos, conocedora de la presión mediática que vive, además de la preocupación por el parto. Ella en estos ocho años lo sabe bien. Madre de tres hijos, sus visitas al hospital para dar a luz fueron, por exigencias del guion real, un gran espectáculo mediático retransmitido a medio mundo.

La actitud de Guillermo de Inglaterra hacia su hermano también parece que se ha relajado. Mientras que inicialmente expresó su preocupación por la relación de Enrique con Markle, ahora se está dando cuenta de que le está dando cierta estabilidad. "Creo que Guillermo ve lo feliz que Meghan hace a Enrique", ha explicado la autora británica Katie Nicholl, quien publicó recientemente el libro Harry and Meghan: Life, Loss and Love. "Creo que está muy impresionado por Meghan, por su trabajo, por la rapidez con la que se adapta a la vida real. Se ha dado cuenta de que Meghan es probablemente lo mejor que le ha podido pasar a Enrique. Y su padre Carlos, piensa que Meghan es maravillosa".

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Sobre la firma

Mábel Galaz
Fue la primera mujer en pertenecer a la sección de Deportes de EL PAÍS. Luego hizo información de Madrid y Cultura. Impulsó la creación de las páginas de Gente y Estilo. Ha colaborado con varias cadenas de televisión y con la Cadena Ser. Ahora escribe en El País Semanal.

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