Infancia y tecnología
Lo vemos continuamente. Niños absortos con el móvil que sus padres les han dejado para que no molesten, para que estén entretenidos, para que dejen de llorar, incluso antes de aprender a caminar. Niños que manipulan la tablet hipnotizados antes de aprender a hablar o escribir y que apenas saben lo que es jugar en el mundo real. Padres que lo fomentan y que manipulan compulsivamente los móviles delante de sus hijos, para enseñar con el ejemplo. Y a todo esto, las autoridades en enseñanza y maestros empeñados en introducir en la escuela las nuevas tecnologías, cuanto antes mejor. Y mientras esto ocurre, un pequeño grupo de niños privilegiados en Silicon Valley crecen, aprenden, juegan y viven libres de dispositivos tecnológicos. Quienes lideran la revolución tecnológica en el mundo no quieren para sus hijos las pantallitas ni en pintura. Por algo será.
Sebastián Fernández Izquierdo. Petrer (Alicante)
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