Kiko Rivera confiesa cómo se arruinó por culpa de sus adicciones
El hijo de Isabel Pantoja explica cómo dilapidó toda su fortuna hasta tener que pedir dinero para pagar el alquiler: "La culpa es mía, totalmente mía"
El paso de Kiko Rivera por el programa de Telecinco GH DÚO está dejando multitud de confesiones por parte del músico, hijo de la cantante Isabel Pantoja. El jueves por la noche Rivera y su mujer, Irene Rosales, volvieron a sentarse en el confesionario del programa para contar qué tal les está yendo en el reality show de parejas.
Durante su charla con Jorge Javier Vázquez, que estaba en el plató de Telecinco, se pudo ver vídeos en los que Irene Rosales contaba cómo había cambiado su pareja y también quien adelantaba los problemas de dinero que habían tenido. "Por una de las cosas que le he reñido mucho es porque lo podría tener todo solucionado, podría tener un buen colchón, si tuviese una cabeza muy centrada", confesaba ella en esos vídeos. "No la ha tenido, no nos podemos poner a pensar en lo que hubiese hecho, así que nada, hemos pasado por una mala época, muy mala".
Vázquez entonces le preguntaba a Kiko "hasta qué punto" había sido dura esa mala época. "Siéndote sincero... Yo he malgastado muchísimo dinero, entre otras cosas por el problema que tenía. Y por gente que se te acercaba, venía contigo, y nunca ponía un duro para nada", explicaba Kiko, en una referencia a su pasado de adicciones a las drogas, algo que él mismo contaba en ese programa hace pocas semanas, hablando de su frecuente consumo de hachís, marihuana y cocaína. "Me iba muy bien el trabajo, pero entonces bajó y me quedé más tieso que la mojama. Tieso, pero tieso, tieso. Esa tiesura ha seguido, he seguido trabajando pero para pagar. Jorge, sin mentirte: muchas veces no hemos podido ni pagar el alquiler de la casa. Y ha sido cuando mi madre me ha ayudado".
Rivera explicaba que había llevado la situación "con la cabeza alta, pero muy mal, muy mal", mientras que Rosales decía que "agobiados pero también intentando ver el lado bueno": "Era porque él había dejado de trabajar". "Por culpa mía", decía alto y claro Rivera, "por no tener la cabeza centrada en un momento, ser un bala perdida. La culpa es mía, totalmente mía". Aseguran que solo han visto la luz "ahora". "Pero no para ganar, para igualar. Estamos empate", reía el también DJ.
Entonces Jorge Javier Vázquez le comentaba que algo que "le pasa a muchísima gente que ha tenido adicciones por lo que sea" es "el dinero que han podido llegar a malgastar". "¿Quieres que te diga cuál es el momento en el que más lo sufrí?", decía el músico. "El día en el que yo me arrepentí de todo lo que he malgastado en mí fue el día en el que mi madre estaba donde estaba y hacía falta un dinero", explicaba en probable referencia al paso de Isabel Pantoja por los juzgados en 2007 (y más tarde por la cárcel, ya en 2014), y a cómo el juez le impuso una fianza de 90.000 euros para poder quedar en libertad, que finalmente acabó pagando.
"¿Y sabes, Jorge? Yo lo tenía. Pero me lo gasté. Y ese día... fue uno de los peores días de mi vida. ¡Qué carajo he hecho con mi vida! ¡Ahora que alguien mío, alguien de mi sangre, necesita eso y yo lo he tenido, y me lo he gastado en otra gente y en mí mismo y en cosas malas!", explicaba ante las cámaras, con evidente dolor. "Ese fue el día que me arrepentí. Eso me va a doler hasta el fin de los días, no haber podido ayudar en el momento necesario de esa manera. La podía haber dado y no la pude dar porque lo había malgastado. Yo tampoco sabía que iba a pasar eso, pero lo malgasté".
Sin embargo, la pareja también agradece la ayuda brindada por muchos de su entorno. Para empezar, la propia cantante. No se han sentido solos. "Tenemos muy buenos amigos que nos han ayudado y nos sentimos orgullosos de la gente buena que nos rodea. Mi madre, su madre, sus hermanos, hasta mi hermana nos ha ayudado", decía Rivera en referencia a Isa Pantoja. "Kiko ha aprendido a valorar todo. Se da cuenta de lo que puede gastar y lo que no. Ahora es superconsciente de eso", decía Rosales. "No hay mal que por bien no venga", refrendaba él.
"Kiko ha cambiado", se oía decir a Rosales en vídeo durante una conversación con sus compañeros. "A mí me ha sorprendido desde hace ocho meses, porque dices: 'Lo que es la puta cabeza... y los vicios, que te trastornan y te cambian por completo", contaba ella, sabiéndose en el punto de mira por su relación.
"Cuando yo empecé con Kiko yo sabía que era lo primero que iban a hacerme, un análisis: 'Irene Rosales, tal y tal, porque va a estar con Kiko con dinero'. Es normal que lo piensen, si casi todas las que se han acercado a Kiko han acabado sentándose en un plató", reflexionaba ella. "El día de mañana, si Kiko y yo lo dejamos, jamás en el mundo me sentaría a hablar mal de él porque no es algo que vaya con mi vida. Kiko vive de su imagen, yo no. Yo intereso porque estoy con él. Hemos tenido épocas que hemos estado muy mal de dinero, cuando él lo de... cuando él se puso malo ninguno de los dos prácticamente trabajamos. Yo podía haber dicho: 'Me voy a un plató y me lo voy a llevar [el dinero]'. Esto [GH DÚO] para nosotros ha sido como un ángel caído del cielo. Quién iba a pensar que iban a hacer un Gran Hermano en parejas... Cuando me lo ofrecieron estuve encantada de la vida". Rosales confesaba que era "normal que a Kiko le criticasen": "Era una persona ansiosa, que le daba igual ocho que ochenta, que no estaba bien".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.