¿Malos tiempos para la filosofía?

]Al parecer, nadie sabe muy bien cuál es la causa para que haya descendido tanto la publicación de libros de filosofía. Habría que preguntar a los editores. Es cierto que este descenso coincide con el ocaso de esta materia en la enseñanza media, y tal vez esto haya retraído a las editoriales. Pero no es menos cierto que la filosofía académica sigue, en general, encerrada en su torre de marfil y sin hacer grandes concesiones al público en cuanto a sencillez y proximidad. Vivimos en una sociedad de la transparencia en la que el elitismo y la expresión críptica son objeto de justificado rechazo. Curiosamente, uno de nuestros más importantes pensadores, José Ortega y Gasset, fue también uno de los más legibles y populares. No en vano, suya es la frase: “La claridad es la cortesía del filósofo”. Que los autores sean más accesibles y los editores algo más generosos, y verán cómo se vuelven a vender más libros de filosofía.

Pedro Feal, A Coruña.