_
_
_
_

Cómo afrontar los miedos del verano de los niños

¿A tu hijo le da pánico el agua, no se atreve a meterse en el mar por miedo a que le pique una medusa o ni quiere salir del coche cuando llegáis al campo por miedo a los insectos?

getty
Carolina García

El verano es una época de esparcimiento para los más pequeños de la casa. Una época en la que pueden experimentar cosas nuevas, en la que se tienen que enfrentar a pequeños retos, pero esto tiene una doble vertiente: el disfrute, pero cuando dominan la situación, y el miedo antes dar ese paso en el que no sienten seguros. Vemos como nuestros pequeños se enfrentan a la separación; a perderse; al agua, ya sea mar o piscina. “Los miedos son evolutivos”, nos explica vía correo electrónico Nuria G. Alonso, psicóloga infantojuvenil y directora de Ayudarte Estudio de Psicología. “Esto quiere decir que hay una edad en la que somos especialmente vulnerables a tener esos miedos y cada etapa de desarrollo tiene unos que la definen y que los niños deben superar. Normalmente, los peques van adquiriendo más seguridad en sí mismos y más autonomía y van superándolos por sí solos, pero a veces no son capaces de superarlos, bien por su propia personalidad, por la sobreprotección de sus padres o por circunstancias que han vivido”.

Más información
Regular los deberes: una medida urgente
“La infancia tiene cada vez menos tiempo para jugar”

Según la experta, es difícil conocer todos los miedos, es importante consultar esas dudas con especialistas cuando empiezas a ver que el temor está afectando al niño, o a los padres, y le está limitando para salir a la calle, para ir al colegio; que le afecta en su rendimiento escolar, en su estado de ánimo o en la forma que tiene para relacionarse con los demás. “Por ejemplo, al año es natural que tu hijo pueda tener miedo al retrete o a separarse de sus padres, pero si no lo ha superado con 10-11 años quizás debes valorar acudir a un especialista, porque a esa edad los miedos habituales son a los exámenes, a la muerte o a su aspecto físico”, explica Alonso.

Los miedos más comunes

¿A tu hijo le da pánico el agua, no se atreve a meterse en el mar por miedo a que le pique una medusa o ni quiere salir del coche cuando llegáis al campo por miedo a los insectos? A lo mejor este año no ha querido ir de campamento, por no estar lejos de casa o, ante una divertida tarde en la feria, vive con angustia la experiencia por miedo perderse.

Por lo general, los miedos más frecuentes son: ansiedad ante lo extraño y ansiedad por separación, miedo al agua, miedo a los animales (especialmente perros y gatos) y miedo a la oscuridad. “Todos ellos tienen que ver con la rutina cotidiana de un niño: relacionarse con otros (personas u animales), ducharse o nadar (en el verano especialmente), dormir. Por tanto, si en ese transcurso ha tenido malas experiencias relacionadas con ese peligro (porque las ha experimentado él o las ha visto en otros) o por la reacción de sus padres ante ese miedo (bien porque a ellos les asusta o porque han sido especialmente sobreprotectores) pueden llegar a conseguir que no confíen en que ellos mismos puedan superarlos”, argumenta.

Pautas para superar los miedo

Enseñar herramientas a los niños para superar los miedos y transmitirles seguridad es la labor que deben afrontar los padres para poder ayudarles. Forzar la situación con cariño y respetar sus tiempos también forma parte de esta estrategia. “Uno de los errores más frecuentes de las familias que vienen al estudio es pensar que como estos miedos sólo surgen un par de meses en verano, no es necesario que tu hijo los afronte y ya se le pasará algún día. Pero nada más lejos de la realidad, ese día es ahora porque cuando un miedo no se afronta, se hace más grande hasta tal punto que a veces tu autoestima sale lastimada, te pierdes muchas cosas y puede incapacitarte”, explica la experta.

Tener miedo es una emoción natural, “la fórmula es afrontarlos y superarlos desde pequeños. Los miedos nos hacen limitarnos, dañan nuestra autoestima y nos convierten, a la larga, en personas inseguras.”

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Carolina García
La coordinadora y redactora de Mamas & Papas está especializada en temas de crianza, salud y psicología, y ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS. Es autora de 'Más amor y menos química' (Aguilar) y 'Sesenta y tantos' (Ediciones CEAC). Es licenciada en Psicología, Máster en Psicooncología y Máster en Periodismo de EL PAÍS.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_