Guía para comprar los mejores auriculares para cada ocasión

Junto a los teléfonos móviles, los auriculares son de los dispositivos tecnológicos más utilizados en casi cualquier sitio y ocasión. La portabilidad de muchos modelos y la posibilidad de desconectarse del entorno a través de la música y otras actividades, los hacen atractivos para llevarlos a todas partes. Tan solo en 2016, las ventas mundiales de auriculares inalámbricos se incrementaron un 83%, hasta los 8.136 millones de euros, según un informe de la consultora tecnológica FutureSource. De acuerdo con este reporte, el aumento se debe al éxito de las nuevas tecnologías de auriculares con banda para el cuello y los modelos completamente inalámbricos.

Sin embargo, los auriculares también son uno de los accesorios más desconocidos. A pesar de que cualquier modelo es capaz de reproducir los sonidos, no lo hacen de la misma manera. Es más, probablemente no haya dos modelos iguales, y aunque haya quien pueda pensar que le basta con que se escuchen bien, tener más información sobre la gran diversidad de prestaciones técnicas podría ayudar a tomar mejores decisiones de compra y a cambiar positivamente la manera en que escuchamos música.

Para que no falles en tu elección, en EL PAÍS Escaparate hemos elaborado esta guía, en la que explicamos los principales tipos y modelos que pueden encontrarse en el mercado que ofrecen un sonido de calidad. Además, a través de las voces de expertos, recomendamos los auriculares más adecuados para los tipos de uso más comunes (casa, oficina, ciudad, viajes y práctica deportiva), así como una selección de varios modelos para cada situación.

Los auriculares se dividen en dos grandes categorías: diadema e in ear, que además del tamaño, ofrecen distintas funcionalidades y posibilidades de configuración.

De diadema

Son los conocidos popularmente como cascos, es decir, los auriculares que rodean la cabeza de lado a lado con una especie de diadema para sujetarse a ella. Actualmente, son el tipo de auriculares con más modelos disponibles en el mercado por lo que existen diferentes subdivisiones según su construcción, colocación y conexión.

Construcción

Este aspecto tiene que ver con el acabado externo de las copas, que pueden estar elaboradas con una rejilla (auriculares abiertos) o completamente selladas (cerrados).

• Abiertos. Las copas de los auriculares tienen una rejilla en el lado exterior, por donde dejan entrar y salir el sonido; es decir, se escucha el ruido ambiental. Esta construcción hace que el audio sea más natural porque evita las reverberaciones. También se consigue un sonido más amplio y con una separación más clara entre los instrumentos.
• Cerrados. Las copas de los auriculares están selladas por completo y las almohadillas suelen ser gruesas, lo que evita que el sonido entre o salga (aíslan del exterior). Por lo tanto, el sonido tiene mayor presión y sensación física, pero también suena menos espaciado.

Colocación

De acuerdo con la forma en que las almohadillas de los auriculares se posicionan sobre la oreja o la cabeza, las características del sonido pueden variar.

• Circumaurales. Las almohadillas rodean por completo la oreja y se apoyan sobre la cabeza. Suelen ser los más cómodos, y gracias a su tamaño, también son los que aportan un sonido más amplio y con una mejor separación entre los instrumentos —aunque no son precisamente los más portables—.
• Supraurales. Las almohadillas son más pequeñas y, por lo tanto, se apoyan sobre la oreja. Normalmente, estos son los modelos para un uso portátil. Sin embargo, el menor tamaño de las cápsulas ofrece una calidad de sonido inferior.

Conexión

Categoría de auriculares de diadema que los divide entre los modelos que se conectan por medio de un cable o a través de tecnologías inalámbricas, como Bluetooth y NFC. Los que son alámbricos suelen aportar un mejor sonido en comparación con los inalámbricos del mismo rango de precios.

'In ear'

Son los auriculares que se introducen directamente en el oído y que sellan el orificio mediante unas gomas. Provienen de los monitores que utilizan los músicos en los escenarios y, a su vez, son la evolución de los auriculares de botón —aquellos que no se introducen en el oído, sino que descansan en el interior de la oreja—. Los modelos varían esencialmente por su tipo de conexión, alámbrica o inalámbrica.

Calidad de sonido. Lo primero que hay que evaluar es el rango de frecuencias que pueden reproducir los drivers (los altavoces de los auriculares). El oído humano es capaz de escuchar a partir de 20 hercios (20 Hz) en las frecuencias bajas y hasta 20.000 hercios (20 kHz) en las más altas. Por lo tanto, el primer aspecto que hay que tener en cuenta es que los auriculares puedan, al menos, abarcar ese espectro. También conviene destacar la dinámica, es decir, la velocidad con la que los auriculares son capaces de pasar de una frecuencia a otra. Cuanto más rápidos sean, la riqueza del sonido será mayor.

Por otro lado, están los aspectos relacionados con la reproducción de los instrumentos. El primer factor es la escena, que es la recreación tridimensional de todos los elementos sonoros (la amplitud y la profundidad de los sonidos). De la misma manera, la separación de los sonidos de cada instrumento marca la diferencia para que la música no se oiga como una pasta sin matices y que cada elemento tenga la presencia justa para que no haya ninguno que se solape con el resto.

Además, es importante tener en cuenta la resolución con que los auriculares hacen notar los detalles finos de las grabaciones, como las respiraciones, los golpes o los rasgueos.

Ecualización. Más allá de los aspectos relacionados con la calidad del audio, cada modelo de auriculares se distingue, además, por tener un perfil de sonido particular, sin que esto tenga que ver necesariamente con que sean unos buenos o malos dispositivos. Esto se debe a su ecualización preestablecida, es decir, al refuerzo o la disminución de los rangos de frecuencias (graves, medias y agudas).

Las ecualizaciones más populares son las siguientes: la equilibrada, balanceada o plana, que es la que más respeta la grabación original y, por lo tanto, la que se considera de más alta fidelidad, y es la más recomendada para escuchar géneros como la música clásica o el jazz ; la ecualización en V, que remarca los graves y los agudos y que es ideal para géneros como rock, metal, hip-hop o electrónica; y los auriculares basshead, que refuerzan los bajos para que tengan mayor pegada y profundidad.

Aislamiento. Es la cualidad de unos auriculares para impedir la entrada o salida de sonido. Es una de las características esenciales de los modelos cerrados. Actualmente también existen los auriculares con cancelación activa de ruido, que utilizan un sistema electrónico que, mediante el uso de micrófonos para medir el ruido externo, crean una onda de sonido artificial que elimina el sonido ambiental —es importante aclarar que este efecto repercute en la calidad de la música—.

Comodidad. Unos auriculares cómodos pueden cambiar por completo la manera de disfrutar la música, sobre todo cuando se utilizan durante largos periodos. Los expertos destacan siempre que entre los auriculares de diadema serán más cómodos los modelos que tengan copas más grandes. También influyen los materiales, la suavidad y el acolchado de las almohadillas, así como la presión que ejerzan sobre la cabeza. Este último punto es especialmente relevante para las personas que utilizan gafas, ya que unos auriculares prietos pueden ser muy molestos.

Tamaño y portabilidad. Aspectos especialmente relevantes para los que utilizan los auriculares mientras se mueven. En este sentido, se recomiendan los modelos de diadema que se pueden plegar y que no ocupen mucho espacio, u optar por unos in ear, que caben en cualquier sitio y son los más ligeros. Pero el tamaño también puede ser un factor importante para un uso en oficina, especialmente en ambientes ejecutivos en los que haya que ser más discreto o formal.

Conexión. Si bien los auriculares con conexión inalámbrica a través de Bluetooth o NFC son la última moda del mercado y pueden resultar atractivos por su practicidad, hay que tener en cuenta que estos sistemas ofrecen una calidad de sonido menor en comparación con auriculares de cable en un rango de precio similar.

¿PARA QUÉ NECESITAS LOS AURICULARES?

No es lo mismo escuchar música en casa, relajadamente, que hacerlo en el trabajo para poder concentrarse o disfrutar de ella durante un viaje. Para cada uso y situación, existen modelos que se adaptan a mejor a nuestras necesidades.

Para escuchar música en casa

Nuestra casa es el mejor sitio para apreciar la música con todos sus detalles y matices puesto que es donde podemos tener silencio a nuestro alrededor y un mejor reproductor de música a nuestro alcance. José Aragonés es director y fundador de la web especializada en auriculares Headphoniaks y para escuchar música en nuestro hogar recomienda modelos abiertos circumaurales porque “respetan la naturalidad del sonido y reproducen la escena musical de la forma más precisa”.

No obstante, recuerda que este tipo de auriculares suelen ser modelos de gama alta y que, por lo general, requieren más potencia para sonar a un volumen adecuado: “Necesitas un reproductor HD que les dé suficiente potencia o pincharlos a un amplificador”. Además, sugiere comprobar que sean unos auriculares cómodos ya que hay algunos “que suenan muy bien pero son insufribles: aprietan mucho y las almohadillas son duras”. Y ya puestos a desembolsar una buena suma de dinero en unos auriculares con estas características, aconseja elegir el perfil de sonido que más nos guste.

A partir de estas sugerencias, elegimos dos modelos que son una muestra de distintas ecualizaciones y de las diferentes gamas en auriculares de diadema para usar en casa.

• Grado SR60e. Con el paso de los años, estos auriculares abiertos supraurales se han convertido en un clásico, especialmente recomendados para los fanáticos del rock, el metal y otros géneros en los que los graves y los agudos requieren un empuje extra. Se fabrican en Brooklyn, Nueva York, una garantía de que han sido revisados hasta el más mínimo detalle. Están fabricados en un polímero de plástico que elimina cualquier distorsión. Son de peso ligero y una gran comodidad para utilizarlos durante horas.

• Meze 99 Classics. Con copas cerradas en madera de nogal y un sonido natural, estos auriculares pueden cumplir las exigencias de cualquier melómano. Tienen una ecualización balanceada y un sonido dinámico, por lo que responden adecuadamente a cualquier género musical, especialmente el jazz o la música clásica. A pesar de ser una gama media alta, no necesitan un amplificador, y suenan de forma excepcional incluso con un móvil.

Pablo Guerrero, de la tienda neoyorquina especializada en auriculares Audio46, opina que para elegir unos cascos para la oficina depende de si necesitamos aislarnos del ruido externo o queremos estar pendientes cuando alguien nos habla. Para ello, optaríamos por comprar unos auriculares cerrados o abiertos, respectivamente. En ambos casos, sugiere que en entornos ejecutivos es buena señal si la gente “te habla sin darse cuenta de que llevas auriculares”, es decir, que son mejores los modelos discretos.

Guerrero deja constancia de que es importante fijarse en la impedancia mínima de los auriculares, que es la potencia eléctrica que hace falta para que suenen a buen volumen. Así, tanto para conectarlos al móvil como a un ordenador, recomienda modelos debajo de los 35 ohms. Como la mayoría de los expertos, también prioriza la comodidad, sobre todo para los que usan gafas.

Por último, señala que para situaciones laborales, unos auriculares con micrófono son mejores en el caso de que tengamos que atender llamadas y que es preferible que sean de cable largo para que alcancen la salida de audio del ordenador. Teniendo en cuenta estas observaciones, recomendamos tres modelos con micrófono que cubren los anteriores requisitos.

• Sony WH-1000XM2. Auriculares cerrados inalámbricos de alta resolución con cancelación activa de ruido inteligente. Se puede optimizar el sonido en función del tamaño de la cabeza, las gafas, el pelo, así como la actividad que estemos realizando. Además, mediante la aplicación Headphones Connect permite elegir la opción de escuchar los sonidos esenciales, como las voces de la oficina, y cuenta con una función para bajar el volumen antes de hablar colocando la mano sobre la carcasa.

• Beyerdynamic DT 240 PRO. Creados originalmente para la monitorización de audio profesional en un estudio, estos auriculares cerrados circumaurales ofrecen un sonido claro, natural y equilibrado de gran calidad. Destacan sus bajos limpios, medios vibrantes y agudos definidos. A pesar de que cubren toda la oreja, su diseño compacto y discreto los hace ideales para un entorno de oficina, ya que también aportan una buena reducción de ruido externo. La suavidad de sus almohadillas brinda suficiente comodidad para utilizarlos durante todo el día.

• Philips TX2. A pesar de su diseño compacto, este modelo in ear alámbrico ofrece audio de alta resolución con unos bajos profundos gracias a sus drivers de 13,5 milímetros y calidad premium y a la forma oval de las copas. Las gomas se ajustan perfectamente al interior del oído para asegurar una experiencia inmersiva. El cable integra un micrófono con control para pasar fácilmente de la música a las llamadas y su forma plana evita que se enrede.

Como productor musical, José María Rosillo ha colaborado con artistas como Jorge Drexler, Marlango y Hombres G, por lo que siempre prioriza que la música tenga “la mejor fidelidad posible” para no arruinar el trabajo que hay detrás de una grabación. Por este motivo, descarta los modelos de auriculares urbanos que son “muy fashion y muy caros, pero que suenan francamente desequilibrados”. En cambio, sí considera esencial “que sean resistentes y aguanten bien la vida en una mochila o una maleta”.

Rosillo utiliza modelos de diadema solo cuando viaja en tren o avión porque a pesar de que son más cómodos, los considera “un poco trasto” para moverse. En cambio, dice que “los auriculares in ear se ven menos y ocupan menos espacio”, aunque no deja de advertir que hay cierto riesgo en “meterse un cuerpo extraño dentro del oído”. Su recomendación de modelos con cancelación de ruido va también en este sentido, ya que en entornos ruidosos permiten escuchar música a un volumen más bajo.

Los siguientes auriculares reúnen los consejos de Rosillo para moverse por la ciudad.

• Bose QuietComfort 35 II. Un modelo tan popular como aclamado por su cancelación activa de ruido. De construcción cerrada y colocación circumaural, permiten nivelar la reducción de ruido en tres niveles para poder estar al pendiente del entrono o desconectarse por completo. Además, cuando estás conectado al móvil puedes acceder a los asistentes de voz Siri, de Apple, o el Asistente de Google, en dispositivos Android. Sus materiales (resistentes a los impactos) están diseñados para sobrevivir a la vida en movimiento. Todo esto, sumado a la reconocida calidad de audio de Bose.

• Audio-Technica ATH-ANC33IS. Unos auriculares in ear ya no significan tener que renunciar a la cancelación de ruido. Un ejemplo son estos Audio-Technica alámbricos que reducen el ruido de fondo hasta en un 90%, envuelto con la calidad de sonido característica de la marca japonesa. En el cable también incluyen un micrófono y un control para responder llamadas que es compatible con cualquier modelo de smartphone.

Viajes

A la hora de viajar en tren o avión, "los requisitos más importantes en unos auriculares son el aislamiento y la comodidad", según Jordi Pastor, periodista de El Viajero. No obstante, afirma que lo ideal es inclinarse por modelos que, además de tener una calidad de sonido aceptable, ofrezcan un equilibrio entre ambos aspectos. “La principal función que se debe tener en cuenta es la cancelación de ruido”, explica, pero apunta que algunos modelos con esta prestación “son más aparatosos que los in ear e incomodan mucho cuando consigues conciliar el sueño”.

Personalmente, Pastor prefiere utilizar auriculares in ear con cable durante sus viajes, ya que además de que le parecen más cómodos, “no se corre el riesgo de perderlos si en algún descuido se caen de la oreja”. Aun así, insiste en que esta elección puede suponer la renuncia a la cancelación de ruido, por lo que todo depende de las preferencias personales. Por este motivo, la siguiente selección tiene en cuenta las diversas posibilidades para unos auriculares de viaje.

• Bose QuietComfort 20. La comodidad y practicidad de unos auriculares in ear se combinan en este modelo inalámbrico con el reconocido sistema de cancelación de ruido de la marca estadounidense. Y si fuera necesario estar pendiente del sonido ambiental en el aeropuerto o la estación, también ofrecen la opción de escucharlo mientras se disfruta de la música en alta calidad. Las almohadillas proporcionan un ajuste cómodo y seguro para utilizarlos durante cualquier trayecto, por largo que sea.

• AKG N60NC. La construcción cerrada de estos auriculares supraurales no son lo único que te mantiene aislado del entorno. Tienen un sistema de cancelación de ruido especialmente pensado para los viajes. Además, se une la calidad acústica del sonido de clase mundial de AKG, con una cálida respuesta de bajos para apreciar la música a otro nivel. También se pueden plegar para guardarlos en un estuche que viene incluido en la compra.

Deporte

Hay tres aspectos fundamentales que Ramón Muñoz, periodista de EL PAÍS, destaca en la elección de unos auriculares para la práctica deportiva. Primero, una autonomía de al menos cuatro horas, ya que es un hecho que son más recomendables los modelos inalámbricos in ear para moverse con libertad y, por lo tanto, necesitan tener una batería suficiente para durar un entrenamiento completo. Por el mismo motivo, también es importante que sean compatibles y se conecten fácilmente al móvil o el reproductor, ya que hay algunos auriculares que flaquean en este punto.

Como todos los deportes implican movimiento, Muñoz considera que es fundamental “sentirnos a gusto y sin miedo de que [los auriculares] se nos caigan”, es decir, que se adapten bien a las orejas o la cabeza. Además, en el caso de que practiquemos deporte en la vía pública, resalta la necesidad de que permitan escuchar el ruido ambiental para estar al pendiente y así evitar accidentes. Debajo, tres modelos que cumplen estas recomendaciones.

• Jaybird X3. Con hasta ocho horas de reproducción y un ajuste seguro y cómodo, este modelo cuenta con aletas intercambiables para un agarre óptimo en orejas de todos los tamaños. Tienen soporte para el cuello y son resistentes al sudor y salpicaduras de agua. La aplicación Jaybird para móvil permite ecualizar y personalizar el sonido al gusto de cada uno. Están especialmente diseñados para runners, pero por sus características y gran sonido son ideales para cualquier actividad deportiva.

• Plantronics BackBeat Fit. Su sólida construcción permite a estos auriculares inalámbricos mantenerse en su sitio durante todo el entrenamiento gracias a su diseño. Cuentan con la clasificación IP57, que los hace resistentes a la lluvia e incluso a un enjuague bajo el grifo. Ya que son de construcción abierta, permiten estar al pendiente del entorno cuando se entrena al aire libre. Ofrecen una autonomía de hasta ocho horas y carga rápida.

• Samsung Gear IconX 2018. Si te gusta hacer ejercicio con poco o nada de peso, estos auriculares completamente inalámbricos te permiten grabar hasta 1.000 canciones en la memoria gracias a sus 3,4 GB de almacenamiento. La música y las llamadas se pueden controlar con solo tocar y deslizar el dedo sobre el dispositivo. Su modo de rastreo automático registra tiempo, distancia y calorías de tus actividades deportivas. Ofrece un sonido nítido y estable con graves potentes para un entrenamiento animado.

Otros aspectos que tener en cuenta para obtener un sonido de calidad y no dañarnos los oídos

El ingeniero y productor de sonido español Dani Bravo recomienda repasar algunos aspectos fundamentales del audio que influyen en la calidad del sonido que escuchamos a través de unos auriculares. A pesar de que el CD ha dejado de ser un producto masivo y ha sido sustituido por el formato digital MP3, las copias en disco compacto se crearon bajo un estándar de 44,1 kilohercios (kHZ) y 16-bit (las cantidades de muestreo y de información, respectivamente, que se toman de los sonidos en una grabación digital), porque es el límite que puede percibir el oído humano. Ambas medidas representan una calidad de 1.411 kilobits por segundo (kbps). En contraste, el MP3, que es un formato comprimido, solo es capaz de alcanzar una reproducción máxima de 320 kbps.

"La calidad suprema sería tener un CD o formatos WAV o FLAC", asegura Bravo, ya que estos dos últimos tipos de formatos digitales son capaces de guardar el audio sin compresión e incluso ofrecen una calidad superior a la del disco compacto. Este punto es importante, insiste el ingeniero de sonido, porque si se escucha música exclusivamente en MP3 (formato utilizado por plataformas de streaming como Spotify), "los cascos ayudan, pero tampoco van a mejorar mucho [el sonido]", aunque matiza que "con unos cascos de mayor fidelidad, va a escucharse mejor".

Aclarado este punto, Bravo también aconseja utilizar el volumen de los auriculares con moderación. “La gente está acostumbrada a subir el volumen progresivamente cuando sale de casa o va en transporte público porque el ruido exterior va aumentando”, explica. Esta mala práctica genera “un nivel acústico bastante alto que puede ser peligroso”, advierte el ingeniero de sonido. Para calibrar los auriculares y escuchar el sonido con un volumen adecuado, recomienda ajustarlo en casa, en silencio, para encontrar un nivel óptimo de referencia y “no subir el volumen mucho más de esa marca”.

*Todos los precios de compra incluidos en este artículo están actualizados a 24 de enero de 2019.