Estos son los momentos más locos de las últimas ediciones de los Oscar

El próximo 4 de marzo, el Dolby Theatre de Los Ángeles acogerá la 90 ceremonia de entrega de los Oscar de la Academia de Hollywood. Jimmy Kimmel volverá a ejercer de presentador. Se espera una gala muy reivindicativa, si no lo fuera sería una decepción, y en el apartado de premios todo apunta a que La forma del agua, de Guillermo del Toro, será la gran triunfadora. Y, como cada año, también se espera una buena cosecha de anécdotas que pasarán a la historia.

Parece que a las estrellas de Hollywood la noche de los Oscar les inspira especialmente. Así que en los últimos años hemos podido disfrutar de discursos geniales y surrealistas, de dedicatorias que nunca se acaban, caídas, la llegada de un repartido de pizzas, actores haciendo flexiones en el escenario y hasta de un selfie colectivo. Aunque llegar al nivel de la confusión de Warren Beatty sobre el escenario el pasado año va a ser difícil. Recopilamos algunos momentos geniales de las últimas galas.

Trey Parker, Matt Stone y el LSD

Los creadores de South Park acudían a la ceremonia del año 2000 como nominados por la canción Blame Canada de South Park: Más grande, más largo y sin cortes y decidieron que en la alfombra roja iban a montarla. Se presentaron vestidos de mujer, con lo que llamaron la atención de los periodistas, pero eso no fue todo. Años después, confesaron que, además, habían consumido LSD. Fue "una noche mágica" para ellos, a pesar de que el premio se lo llevó Phil Collins.

Más de un millón de retuits en menos de una hora

Ellen DeGeneres se propuso lograr un récord con un selfie y lo consiguió. En 40 minutos la foto se había convertido en un fenómeno viral. Fue uno de los grandes momentos de la ceremonia de 2014. Ninguna estrella de las que estaban cerca de la actriz se lo quiso perder, empezando por el primer plano de Bradley Cooper (nominado como mejor actor secundario). Jared Leto se quedó fuera por muy poco. Y Kevin Spacey, protagonista de uno de los grandes escándalos sexuales del año y borrado de la última película de Ridley Scott, aparece al fondo. Algo impensable en esta edición.

Y Penélope gritó: "¡Pedrooooooo!"

El romance de Almodóvar con Hollywood viene de hace tiempo, pero no se confirmó oficialmente hasta el año 2000, cuando el director ganó el premio a la mejor película extranjera por Todo sobre mi madre. Penélope Cruz gritó el nombre de su director fetiche en presencia de Antonio Banderas. Algo se podía sospechar sobre la identidad del premiado. Y Pedro pronunció el famoso discurso de las vírgenes y los santos (Virgen de Guadalupe, Jesús de Medinaceli...), donde también incluyó a Harvey Weinstein (otro que no volverá a estar en los Oscar).

El Oscar que ganó La La Land (durante unos minutos)

Warren Beatty y Faye Dunaway, los míticos protagonistas de Bonnie y Clyde, fueron los encargados de entregar el premio a la mejor película en la última edición. Era un homenaje por los cuarenta años de la película de los sesenta y acabó siendo algo parecido a un velatorio. Beatty leyó el nombre del ganador pero se equivocó. El equipo de La La Land subió a por el premio y, en un abrir y cerrar de ojos, en su lugar estaba el de Moonlight, que resultó ser la película ganadora. Al menos de todo este lío conocimos la cara de los auditores encargado del recuento de votos, que tuvieron que dar muchas explicaciones.

Benigni pisando las butacas

Roberto Benigni reivindicó su condición de 'clown' con una puesta en escena para recoger la estatuilla que consistió en pisar las butacas en las que estaban los (alucinados) invitados, soltar un discurso (muy emotivo) en su inglés de fuerte acento italiano y conseguir uno de los momentos inolvidables de la historia de los Oscar. No era para menos, Sophia Loren le acaba de entregar el Oscar al mejor actor en 1999 por La vida es bella.

Jennifer Lawrence: dos veces en la misma piedra

Durante dos ediciones consecutivas (2013 y 2014), la actriz protagonizó uno de los momentos más virales de la noche con dos caídas. La primera vez, pisó su vestido de Dior cuando subía a recoger la estatuilla (mal momento, sin duda) por El lado bueno de las cosas y la segunda se desplomó sobre la alfombra roja, con todas las cámaras del mundo registrando el momento. En ambas ocasiones salió del paso con mucha elegancia.

El repartidor de pizzas más famoso de la historia

Se llama Edgar Martirosyan y Ellen DeGeneres le convirtió en estrella al invitarle a entregar las pizzas que había pedido entre los invitados de la gala de 2014. Brad Pitt ejerció de ayudante, suministrando las servilletas. Sin duda, De Generes ha sido una de las presentadoras que más (y mejor) juego ha dado en la historia reciente de los premios.

¿Ganó el Oscar Marisa Tomei?

Hay una leyenda (una teoría de la conspiración, más bien) que asegura el Oscar que ganó en 1993 Marisa Tomei por Mi primo Vinny en realidad no le correspondía a ella y que Jack Palance, el veterano actor encargado de entregar el premio, se había equivocado. Nunca se ha confirmado este hecho, pero viendo lo que pasó con Beatty y La La Land (cómo se resolvió), la teoría del error pierde peso. Aunque resulte maravillosa.