Los hijos de Pamela Anderson, Brandon y Dylan, le roban el estrellato
Los jóvenes ya han debutado en la pasarela como modelos y se preparan para seguir sus pasos frente a las cámaras
Nada como una madre para sacar los colores. Da igual el dinero o la fama. Eso es lo que ocurre con Pamela Anderson y sus dos retoños, Brandon Thomas y Dylan Jagger, fruto de su tumultuosa relación con el rockero y miembro de Motley Crüe Tommy Lee. No parece que haya pasado tanto tiempo desde que la escultural modelo y actriz de la serie original Los vigilantes de la playa hablara con EL PAÍS desde su cama, donde guardaba reposo por orden facultativa durante su primer embarazo. Ahora Brandon y Dylan tienen 21 y 20 años, respectivamente, y sus propias carreras en las que combinan un poco de las dotes que llevaron a sus padres a la fama: modelos, músicos, actores y, siempre, surferos californianos.
Ambos jóvenes desfilaron hace una semana en la pasarela de Milán donde la casa Dolce & Gabanna repitió su pase de modelos de millennials. Una colección de moda mostrada al mundo en los cuerpos de los hijos de los famosos, desde Gabriel Day Lewis, hijo del ahora retirado de la farándula Daniel Day Lewis, hasta Christian Combs, hijo de ‘P Diddy’. También desfiló Paris Brosnan, hijo del ex 007 Pierce Brosnan, y Rafferty Law, 21 años, uno de los mejores amigos de Brandon y Dylan y primogénito del también actor Jude Law.
A Brandon Thomas y Dylan Jagger la fama y la moda les acompaña desde la infancia. Como recuerda Brandon en las redes sociales, para su primer día de colegio su madre le vistió de Saint Laurent. Una apuesta que hoy parece premonitoria ya que ahora el mayor de los hijos de Pamela Anderson es el nuevo rostro de esta firma. Pero los aciertos de su madre no restan incomodidad cuando les hace sentir como niños delante de sus 94.000 seguidores en Instagram. La adoran, según han expresado ambos en las redes, pero odian que haga comentarios cuando cuelgan selfies en sus respectivos perfiles. Ambos se quieren labrar una carrera propia, similar a la de sus padres en cuanto a sus ambiciones artísticas pero independiente de ambos.
Por eso apenas comparecen en los mismos actos aunque les atraigan los intereses similares. Además de la moda ambos estudian música en el instituto. Brandon Thomas quiere seguir los pasos de su madre y ser actor. De momento no lo lleva muy bien y no ha hecho mucho más que algún cortometraje. Su sueño es rabajar con Quentin Tarantino. Dylan Jagger, como apunta hasta su nombre, quiere seguir los pasos de su padre y ser músico. Y en las redes ya ha colgado vídeos de algunos de sus trabajos, tocando el piano e interpretando sus propias canciones. Su meta: ser invitado al festival de música de Coachella.
Mientras, ambos comparten otras pasiones de sus padres como el surf, la playa y el amor por los animales. A juzgar por el número de fotos en las que aparecen en sus redes sociales con sus dos perros, Zeus y Biggie, los canes les avergüenzan mucho menos que sus progenitores. En cuestión de amores, llevan una vida más tranquila que los tumultuosos años de pasión, disputas y desamor que unieron y separaron a sus padres. Dylan está soltero y Brandon sale desde hace un año con la también modelo Pyper America Smith, otra millennial con más de 700.000 seguidores en Instagram.
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