Los Versace, en contra de la serie sobre el diseñador

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Los Ángeles fue escenario el lunes de la fiesta de presentación del estreno de la serie estadounidense sobre el asesinato del diseñador Gianni Versace, The Assassination of Gianni Versace: American Crime Story que se podrá ver el día 17. Pero los Versace ya han arremetido contra el proyecto en un intento de desvincularse completamente de su realización. “La familia Versace no ha autorizado ni se ha visto envuelta de ninguna forma en la serie sobre la muerte de Gianni Versace. Dado que no autorizamos el libro en el que se basa ni hemos tenido nada que ver con el guion, este trabajo será considerado como mera ficción”, han informado en un comunicado. 

Desde hace más de un año ya se sabía que el homicidio del famoso modisto, ocurrido el 15 de julio de 1997, iba a centrar la nueva temporada de la exitosa serie que pretende evocar los grandes crímenes mediáticos que estigmatizaron la historia reciente norteamericana. La expectación había ido en aumento, sobre todo desde el pasado verano, cuando se publicaron las primeras imágenes del rodaje en el que participan Penélope Cruz en la piel de Donatella, Edgar Ramírez, en el papel del diseñador y el también cantante Ricky Martin, como el amante de Gianni, Antonio D´ Amico que ya tildó en su día la serie como “ridícula” alegando que la mayoría de las escenas eran “completamente falsas”, pero que sí aceptó reunirse con el actor para ayudarle en la preparación del personaje.

Sin embargo, aunque la familia ha seguido de cerca el proceso de creación, ha esperado al último momento para pronunciarse y reprobar la creación. El productor de American Crime Story, Ryan Murphy confirmó el pasado agosto que pudo hablar con la propia Donatella y que esta le pidió que tuvieran un cuidado especial con el tratamiento de los personajes de sus hijos, Allegra y Daniel, que tenían 11 y 6 años en aquel momento. “Siendo padre lo comprendo. Por respeto hacia ella no estaba interesado en tomar ese rumbo”, declaró entonces Murphy, que también admitió que se ha permitido “ciertas libertades para conseguir un relato más emocional”.

Otro de los puntos críticos es la estrecha relación de amistad que une a Penélope Cruz y Donatella Versace, aunque parece que no se ha visto afectada por el desacuerdo. La española explicó en la alfombra roja de los Globos de Oro que lo primero que hizo cuando recibió la propuesta para el papel fue llamar a su amiga italiana. “Le dije a Murphy que el proyecto sonaba muy interesante, pero que tenía que hacer primero una llamada a Donatella. Así que hablamos durante una hora, necesitaba esa conversación para aceptar el trabajo”, explicó Cruz a ET online. Cruz además contó que el afecto entre ambas permanece intacto: “No puedo contarte nada de lo que hablamos, pero nos llevamos muy bien. De hecho acaba de mandarme flores antes de venir aquí. Es una persona maravillosa, así que quise dejar claro el amor y el respeto que siento por ella. Creo que eso se puede ver en mi interpretación y espero que, cuando lo vea, se sienta feliz por ello”, añadió.

El libro con el que comenzó la polémica, al que se refieren los Versace es Vulgar Favors (Favores vulgares), un trabajo de investigación que publicó en 1999 la periodista estadounidense de la revista Vanity Fair, Maureen Orth. En él se cuentan meticulosamente los crímenes cometidos por el asesino del diseñador, Andrew Cunanan, que además de a Gianni Versace mató a otras cuatro personas. Según la investigación, Cunanan descerrajó dos tiros al diseñador en la entrada de su mansión en Miami, ahora reconvertida en un hotel de lujo y se suicidó una semana después con la misma arma para evitar la cárcel.

Era uno de los diez delincuentes más buscados por el FBI. Precisamente la cadena FX, responsable de la serie se escuda en que simplemente han tomado como referencia el punto de vista del "profundo estudio autentificado como no ficción" de la periodista. Siguiendo el mismo modelo de otras temporadas de American Crime Story, con el caso del deportista O.J. Simpson, por ejemplo.