20 años de Versace sin Gianni Versace
El 15 de julio de 1997 el diseñador era asesinado a las puertas de su casa de Miami. En el 20º aniversario de su muerte, recordamos al modista y la historia de la firma que el creador italiano fundó en 1978
Gianni Versace nació en Calabria (Italia) el 2 de diciembre de 1946. Su pasión por la moda la heredó de su madre, a quien ayudaba desde que era un niño a encontrar piedras preciosas e hilos para bordar en vestidos. Aunque inició los estudios de Arquitectura, a los 25 años decidió seguir su vocación y se marchó a Milán para iniciar su carrera en la industria.
Desde que presentara su primera colección en 1974, su ascenso siempre fue acompañado del éxito. Hasta convertirse en uno de los diseñadores más admirados por la industria, ser uno de los causantes de relanzar la moda italiana y en uno de los creadores mejor relacionados con modelos, actrices y cantantes. Una firma representada por la cabeza de la diosa Medusa —en la que Donatella aterrizaría en 1977— como símbolo de opulencia y que siempre se ha mantenido fiel a las ideas del diseñador: prendas coloridas, atrevidas, sensuales y con un punto de barroco.
En la imagen, el diseñador fotografiado en 1986 por Richard Avedon.
El diseñador italiano Gianni Versace visitó España en enero de 1990. Un viaje a Madrid para presentar por primera vez su colección de alta costura en territorio español.
En una entrevista con este periódico, el diseñador italiano que fundó su firma en 1978 y por entonces ya era una marca de éxito, definía a la perfección lo que era y sigue siendo hoy su marca: “Mis vestidos van dirigidos a mujeres de hoy, sin nostalgias, inteligentes, que no tengan miedo a los colores y a las faldas cortas”, analizaba Versace sobre su estética y sus clientas.
Bernardo pérez
“Ella es la que inspira mi trabajo, la que con su sensibilidad e inteligencia me aconseja y me dice las cosas que le gustan y las que no”, dijo en una entrevista con EL PAÍS Gianni Versace.
El diseñador fundó su firma junto a su hermano Santo, y no pasó mucho tiempo hasta que Donatella se incorporó a la compañía. Los dos hermanos eran uña y carne, así que ella asumió las riendas de la firma tras la muerte del diseñador en julio de 1997. Un peso que sigue llevando hoy sobre sus hombros, y sin visos claros de que su hija Allegra vaya a ser su heredera en la dirección creativa.
En la imagen, Donatella y Gianni Versace en un desfile en Nueva York en 2004.
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Gianni Versace fue uno de los diseñadores que entendió a la perfección la importancia de tener el apoyo de las estrellas de Hollywood y de la industria del entretenimiento, tanto en las alfombras rojas como con su presencia en las primeras filas de sus desfiles. Entre sus amigos se contaba desde la actriz Liz Hurley, a la princesa Diana o a cantantes como Elton John.
En la imagen, el modisto junto a la actriz Eslizabeth Taylor, en la inauguración de una de las tiendas de la firma en París, en junio de 1991.
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La década de los noventa será recordada en la industria de la moda como los años en los que nacieron las supermodelos. Y la mayoría de ellas fueron musas e inspiración para Gianni Versace, que las subió en la mayoría de sus desfiles.
En la imgen, el diseñador con Claudia Schiffer y, a la derecha, Naomi Campbell, en marzo de 1996. Una foto que demuestra que las transparencias y la sensualidad siguen siendo marca de la casa 20 años después de su muerte.
Ante la cercanía del 20º aniversario del asesinato del diseñador Claudia Schiffer le quiso recordar. "Rercordando a un alma bonita", escribía la modelo alemana junto a una foto de Gianni Versace.
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“Las chicas de Gianni”, escribía junto a esta foto la modelo Naomi Campbell, una foto histórica en la que tampoco faltan Claudia Schiffer, Carla Bruni o Cindy Crawford. Dos días antes del aniversario de su muerte, la conocida como la diosa de ébano ya le quiso rendir homenaje a su amigo en las redes sociales, y publicó dos fotografías en su cuenta de Instagram. “Siempre en mi corazón”, escríbia también la británica en el pie de foto.
La misma red social que ha utilizado su hermana Donatella para recordar a su hermano. "Gianni Versace 1997 - 2017. En el 20º aniversario de su muerte, todavía se le echa de menos tanto como siempre. Donatella, Santo, Allegra", escribía la diseñadora junto a un retrato de Gianni.
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Gianni Versace vistió, entre otros, a la princesa Diana, Madonna, Sting, Elton John, Demi Moore, Kim Basinger, Courtney Love, Prince y Michael Jackson. Con una cartera de clientas de renombre, no es de extrañar que algunos de su vestidos se hayan convertido en iconos.
De izquierda a derecha: el vestido negro con aperturas de imperdibles con el que Elizabeth Hurley acudió al estreno de ‘Cuatro bodas y un funeral’ en Londres, en mayo de 1994. Diana de Gales, con un vestido negro que causó sensación y supuso un golpe de Estado en su armario tras su separación de Carlos de Inglaterrra. De hecho se comenta que el diseñador le llegó a ofrecer a Lady Di un millón de libras para que protagonizara una de sus campañas, algo que nunca ocurrió. Y, a la derecha, la modelo Cindy Crawford con un vestido rojo de impresión en la alfombra roja de los premios Oscar de 1991, cuando acompañaba a su entonces marido, el actor Richard Gere.
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El diseñador italiano Gianni Versace aplaudido por varias modelos tras su desfile de la colección de verano en la Semana de la Moda de París de enero de 1997. Por esa fecha el diseñador ya llevaba dos décadas de carrera a sus espaldas, y había conseguido no solo levantar un imperio de la moda sino un estilo personal muy claro: colores y estampados llamativos, escotes y aperturas en los trajes de infarto, transparencias y asimetrías eran sus principales caracetrísiticas.
Giorgio Armani contó que en una ocasión Gianni le dijo: "Giorgio, tú vistes a las mujeres elegantes, y yo a le zoccole, a las prostitutas”. Un diseñador que nunca tuvo miedo de no tomarse demasiado en serio.
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El diseñador Gianni Versace posa en una de las impresionantes salas de su mansión de South Beach, en Miami, en abril de 1996. A las puertas de su residencia, un palacete de estilo colonial español, fue tiroteado por Andrew Phillip Cunanan el 15 de abril de 1997. A pesar de que el diseñador llegó a ser trasladado al hospital, Gianni Versacce fallecía a los 50 años como consecuencia de los dos disparos que recibió en la nuca.
Para el universo de la moda el crimen fue un mazazo. Diseñadores y modelos expresaron su dolorido pasmo ante la noticia de la desaparición de un diseñador hecho a sí mismo que basó siempre su trabajo en el impacto, los colores llamativos y la sorpresa.
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El FBI atribuyó la muerte del creador al asesino en serie Andrew Phillip Cunanan, a quien apuntaron desde un primer momento como sospechoso del crimen. Al verse acorralado por la policía, quien se convirtió en uno de los diez fugitivos más buscados en Estados Unidos (que era perseguido por otros cuatro asesinatos) se suicidó ocho días después dejando algunas preguntas por resolver y cuyo móvil sigue siendo una incógnita.
Su cuerpo fue hallado en un yate, y las autoridades determinaron que se había quitado la vida con la misma pistola con la que disparó a Versace cuando regresaba a su casa de una caminata.
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El diseñador Gianni Versace en un fotograma del documental para televisión ‘El emperador del exceso', un retrato de un modisto, que desde sus humildes orígenes Reggio Calabria (ciudad del sur de Italia en la que nació el 2 de diciembre de 1946) consiguió ascender hasta la cima de la industria de la moda.
La película incluía numerosos testimonios de personajes que le acompañaron a lo largo de sus años, como Sting o Elton John, así como de su primer amor, Bruno de Robertis.
Tras su muerte, sus hermanos Santo y Donatella (a la izquierda) Versace, decidieron enterrar las cenizas de Gianni en una ceremonia privada en el cementerio de una localidad en las cercanías del lago Como (Italia).
Un acto íntimo que sucedió a un multitudinario funeral que no se quisieron perder ni personalidades de la industria de la moda ni destacados personajes de la vida social y la industria del entretenimiento. A la ceremonia religiosa, celebrada en la Catedral de Milán, asistieron 2.000 personas a despedirle, entre las que estaban Elton John (que le dedicó al fallecido diseñador su disco ‘The Big Picture’), Lady Di (que moriría poco después que Gianni), Naomi Campbell, Karl Lagerfeld o Carolyn Bessette Kennedy.
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Antonio D'Amico fue la pareja del diseñador durante 15 años. Al fallecer Gianni Versace, D'Amico adquirió un segundo plano en su funeral en Milán y se esfumó del mapa para la familia Versace. En una ocasión, contó que fue terrible perder a su pareja, así como también sentirse repudiado por sus familiares.
Tras su muerte, y según dejó establecido el diseñador en su testamento, D’Amico pasó a recibir una pensión mensual de unos 28.000 dólares. En la imagen, D’Amico en el funeral en memoria del diseñador en la Catedral Milán.
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Tras la desaparición de Gianni Versace, la marca pasó por duros momentos financieros a principios de la década de los 2000. Unas turbulencias financieras que obligaron a la marca italiana a abandonar sus colecciones de alta costura en 2004, y en 2009 seguían registrando pérdidas millonarias a pesar de que seguían gozando del favor en alfombras rojas de las famosas incondicionales a la firma.
Con la recuperación de Donatella Versace de sus adicciones, la firma empezó a salir del pozo gracias, entre otras cosas, a la mediática colaboración de dos colecciones que lanzó al mercado con la firma sueca de 'fast fashion' H&M.
Tras la muerte de Gianni Versace, su hermana Donatella se hizo con las riendas de la dirección artística de la marca. En los primeros años, intentaría adaptarse a las nuevas modas perdiendo algo de la identidad de la empresa fundada por su hermano en los setenta y no recogió las mejores críticas.
En los últimos años, la diseñadora ha vuelto a los orígenes, y ha recuperado el estilo atrevido, sensual y chillón. Además, ha diversificado la marca, que no solo mantiene el éxito de sus colecciones de prendas y accesorios, sino que tiene también dos hoteles de lujo (en Milán y Dubái) e incluso colecciones de menaje para el hogar. Además, Donatella ha impulsado retrospectivas y exposiciones dedicadas al trabajo de su hermano.
En la imagen, la diseñadora saluda tras presentar su colección de otoño/invierno 2017 en París.
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En su testamento, Gianni Versace dejó establecido que el 50% del imperio de la moda que había creado era para su sobrina Allegra Beck, hija de Donatella, que tenía 11 años cuando su tío fue asesinado. Al cumplir la mayoría de edad en 2004, la joven heredó 500 millones de dólares.
Hoy tiene la última palabra en la venta y otros detalles de la línea de ropa de Versace, aunque son muchos quienes dudan que pueda asumir en un futuro el papel que adquirió su madre al frente del departamento de diseño de la firma. Unas suposiciones que no han ayudado a disipar que Allegra no se prodigue mucho ni en desfiles de Versace ni en eventos, así como tampoco los problemas alimentarios que arrastró la joven durante su adolescencia.
En la imagen, Allegra Versace en junio de 2016 en un evento en Milán.
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En el año en que se cumple el 20º aniversario de la muerte del diseñador, el modista también ha sido noticia porque su asesinato se va a convertir en el argumento de la segunda entrega de la serie ‘American Crime Story’. La historia, producida por Ryan Murphy y que tratará de ser lo más fiel posible a la historia, no verá la luz hasta el año que viene en Netflix.
En el reparto figura Penélope Cruz, que interpreta el papel de Donatella Versace, su íntima amiga y la hermana del diseñador italiano. También hace sus pinitos como actor el cantante Ricky Martin, que interpreta Al amante de Gianni, Antonio D'Amico. Edgar Ramirez se pondrá en la piel del desaparecido modista.
Veinte años después de la muerte de Gianni Versace, hoy la firma que creó en 1978 con su hermano Santo se ha colocado en los primeros puestos de las marcas de lujo de mayor éxito. Una marca familiar que siempre ha rechazado que uno de los conglomerados del lujo entrara en su accionariado, aunque sí accedió en 2014 a que la firma Blackstone comprara el 20% de la compañía.
Los últimos resultados, en cualquier caso, tienen un sabor agridulce. Mientras Versace consiguió amentar hasta un 3,7% sus ventas, hasta los 668 millones de euros, la compañía admitió unas pérdidas de 7,4 millones. Los resultados han causado algo de incertidumbre, pero la empresa está sana, definitivamente más sana que 10 años atrás y con Donatella Versace más fuerte que nunca.
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