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Olvide a Julio Iglesias: esta es la apasionante vida sexual de Jack Nicholson

El actor, que ha cumplido 80 años este 2017, ha tenido uno de los currículums sexuales más nutridos de Hollywood. Entre sus amantes está la madre de Justin Trudeau

Jack Nicholson con su pareja de entonces, Anjelica Huston, y rodeados de dos mujeres policías en 1970.
Jack Nicholson con su pareja de entonces, Anjelica Huston, y rodeados de dos mujeres policías en 1970.Getty Images

Jack Nicholson ha cumplido ochenta años en 2017. Icono del Hollywood postmoderno, de la interpretación llevada al límite, de la vida salvaje y de ese arte conseguido por muy pocos que es el de saltar cómodamente de productos comerciales a proyectos más íntimos y artísticos, Nicholson tiene también un rincón en su currículum vital que no tiene nada que envidiar al de Julio Iglesias pero que, sin embargo, no está reflejado en cientos de memes: el de su vida sexual.

Kim Basinger describió a Nicholson como "el individuo más sexual que nunca he conocido". La actriz Karen Mayo-Chandler dijo de él: "Es una maquina de sexo sin fin. Le gusta la diversión y los juegos. Azotes, esposas, látigos, Polaroids…"

Una de sus mejores anécdotas, y una de las más desconocidas para el gran público, es que a finales de los años sesenta decidió vivir tres meses completamente desnudo. Era, más que un reclamo sexual, una especie de obsesión. Según una de sus biografías, Five Easy Decades, el actor no se vestía ni para recibir a productores (Roger Corman es testigo), a su familia (incluidas sus hijas) ni a periodistas que acudían a su mansión de Mulholland Drive (menos mal que en Los Ángeles no hace frío) a entrevistarlo.

Con la revista Rolling Stone habló de esta etapa en 2006. "Lo consideré totalmente necesario. Soy muy consciente de mi cuerpo. No es que tenga un gran tipo. Y aquella era una era de libertad. Sé que casi volvió loca a mi hija mayor. Solo quería estar más relajado dentro de mi piel. Pero no resolvió del todo mis complejos, como muchos experimentos que crees que acaban ayudándote pero al final no lo hacen".

Puede que Nicholson no tuviese el gran cuerpo de Warren Beatty, pero nunca le hizo falta para mantener una de las vidas sexuales más activas de Hollywood. Durante los sesenta y los setenta, su nivel de conquistas solo rivalizó con su número de nominaciones a los Oscar (cinco en solo siete años) y su adicción a las sustancias (marihuana, cocaína o LSD). "Me gusta colocarme, diría, unos cuatro días por semana. Creo que esa es la media para cualquier estadounidense. El año pasado probé las mescalinas", contó en una entrevista a la revista People en 1980. Desde luego, eran otros tiempos.

Actrices, cantantes y modelos como Diane Keaton, Kelly LeBrock (de La mujer de rojo), Candice Bergen, Rachel Ward, Joni Mitchell, Janice Dickinson o Margaret Trudeau (sí, la madre de Justin Trudeau, primer ministro de Canadá) son algunas de sus conquistas. Y Anjelica Huston una paciente pareja que aguantó 20 años a su lado. Kim Basinger, que rodó con él Batman (Tim Burton, 1989), describió a Nicholson como "el individuo más sexual que nunca he conocido". La actriz Karen Mayo-Chandler recordó su vida sexual con Nicholson en una entrevista concedida a Playboy en 1989: "Es una maquina de sexo sin fin. Le gustan la diversión y los juegos. Azotes, esposas, látigos, Polaroids…".

Su entendimiento del sexo como algo vivo, orgánico y bruto llegó al set de rodaje de El cartero siempre llama dos veces (Bob Rafelson, 1981), que incluye una de las escenas de sexo más famosas de la historia del cine (la que comparte con Jessica Lange en la cocina). Jack, empeñado en hacer de esa escena algo realista, se empeñó en que su personaje debería mostrar una erección bajo los pantalones. Pidió al director, Bob Rafelson, que se le facilitase una prótesis para simularla, pero nadie se lo tomó en serio. "Si estás tan empañado, sube las escaleras y haz tú algo al respecto". Y Nicholson lo hizo: se alejó del set desabrochándose la cremallera de los pantalones. Eso sí, después se dio cuenta de que aquello no iba a salir bien y se convenció de que tal vez no era una buena idea.

La dificultad para conseguir una erección en público resulta chocante en un actor que, atendiendo a datos publicados por tabloides como The Sun o The Mirror, ha tenido sexo con unas 2.000 mujeres. Según un reportaje de la revista estadounidense Closer, el actor se sinceró admitiendo que ha tenido "todo lo que un hombre podría desear, pero nadie puede decir que haya tenido éxito en los asuntos del corazón". Como si fuese el tercer acto de una comedia erótica de conquistas, el héroe se ve con un currículum sexual envidiable, pero nadie a su lado para sentarse en el porche.  

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