Batalla perdida
Día 11 de octubre. Caluroso otoño. Amanece en la ciudad. Una gruesa capa sucia de smog ahoga los primeros rayos de luz. Miles de vehículos —casi todos con un solo ocupante— invaden las calles y carreteras. Mismo paisaje día tras día. Cientos de ciudades en todo el planeta repiten el mismo esquema. Al contemplar todo esto me pregunto si los intentos de mitigar los efectos del calentamiento global darán algún fruto. Nuestra cortedad de miras juega en contra de esos intentos. Nuestra incapacidad para pensar en el futuro, es perder la batalla.— Antonio de Régil Arteaga. Madrid.
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