EL PAÍS moviliza a su redacción para el 1-O

Un programa de televisión en directo presentado por Carlos de Vega y Marta Fernández. Una tirada especial para el periódico en papel. Un despliegue de unidades móviles para llegar cuanto antes a los focos calientes de la actualidad. Un equipo de opinión que reflexionará en directo sobre los acontecimientos. El referéndum de independencia de Cataluña, previsto para este domingo, es un día ya histórico para España. Y también para EL PAÍS. La redacción en su conjunto se movilizará para cubrir una jornada que se augura imprevisible y para la que este medio ha desplegado un plan masivo de cobertura que se adaptará a cualquier tipo de escenario informativo. Puedes seguir el especial en este enlace.

"Se trata de lograr la mejor cobertura posible. Y no hablamos de un despliegue especial solo para el uno de octubre. Arrancaremos el sábado, continuaremos el domingo y el lunes, prorrogable si la situación lo exige", explica Jorge Rivera, director adjunto de información de EL PAÍS. La cobertura del día clave en el procés secesionista será multimedia y excepcional en cada una de las vías informativas de este diario. La edición en papel contará con una paginación y tirada superiores a las habituales. Los equipos de periodistas desplegados se dividirán entre los dedicados a la cobertura más previsible y las unidades móviles, tanto para vídeo como para los artículos escritos, estarán persiguiendo los focos noticiosos según se vayan produciendo.

EL PAÍS cubrirá el 1-O desde todos los focos y lugares. Barcelona y su área metropolitana, Lleida, Girona o las poblaciones de Berga, Badalona y Sabadell son algunos de los lugares claves de la cobertura. Se seguirá exhaustivamente a las organizaciones catalanas clave durante el procés, como Omniúm y ANC, y a todos los líderes del referéndum independentista. Qué se diga en los medios de información catalanes e internacionales y los hashtags que vuelen en redes sociales estarán también en el rádar. "Pero lo que más nos importa es estar al tanto de lo que pasa en la calle", aclara Rafa de Miguel, redactor jefe de la sección España de EL PAÍS. "Y queremos retratar también a la Cataluña que no va a votar, no solo a la que acuda al referéndum".

La normalidad de lo excepcional es una de las tónicas que extrae Miquel Noguer, redactor jefe de EL PAÍS Cataluña: "Llevamos desde el 2012 con el proceso soberanista y desde entonces hemos tenido cuatro o cinco jornadas muy intensas, que nos han entrenado para el domingo. Aunque es cierto que lo de este domingo sobrepasa a todas las demás". La redacción de Barcelona trabajará codo con codo con los efectivos desplazados de Madrid para una cobertura que, según Noguer, no se ve desde los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992. "Los veteranos del lugar recordamos aquella redacción conjunta. De alguna manera, el esfuerzo conjunto que se está haciendo ahora recupera aquel espíritu".

Uno de los ejes informativos clave será el programa de televisión que arrancará en directo a las 8.30 de la mañana del domingo. Con la Sagrada Familia de fondo, este programa supondrá el retorno como presentadora televisiva de Marta Fernández, con Carlos de Vega, subdirector de vídeo y fotografía de EL PAÍS, acompañándola en la narración. Habrá entrevistas en directo tanto a los protagonistas políticos de la jornada como a personalidades como Xavier Vidal-Folch, Lluís Bassets, Milagros Pérez Oliva y Margarita Saenz Díez que opinarán en directo sobre los acontecimientos de la jornada.

Como el resto de la cobertura, EL PAÍS Vídeo también estará abierto a la improvisación. Están previstos tres tramos informativos: de 8.00 a 11.30 como arranque del seguimiento de la jornada, a partir de las dos de la tarde el resumen informativo hasta ese momento y finalmente un tramo de análisis sobre lo acontecido a partir de las siete de la tarde. "Pero ninguna de estas horas es fija", aclara De Vega. "No es como otras veces, en el que sí tenemos reglado quién entra y quien sale por escaleta. El domingo estaremos muy abiertos ante la incógnita de qué ocurrirá, preparados para reaccionar y contarlo sobre la marcha".

La reflexión más allá de la noticia jugará también un papel esencial en la cobertura del 1-O. El sábado, el editorial de EL PAÍS tratará de explicar en qué consiste el referéndum y por qué, en opinión de esta cabecera, no se debe acudir a votar. El domingo, el editorial será un artículo pausado en el que EL PAÍS quiere recordarle a sus lectores dónde ha estado, está y estará en relación de Cataluña. "Queremos reafirmar nuestro apoyo a una constitución descentralizada y su reforma como vía para canalizar las demandas del independentismo. Dentro de la constitución caben todas las opciones, pero fuera de ella no cabe nada", indica Nacho Torreblanca, jefe de Opinión de EL PAÍS.

Esta apuesta editorial se complementará con un rango de tribunas que apostarán por la pluralidad de puntos de vista sobre el procés. El sábado se estrenará en EL PAÍS como columnista Eduardo Madina, con un análisis de la situación. Y el domingo se apostará por un despliegue muy poco habitual en las páginas de opinión del periódico. "Doblaremos nuestra página uno para presentar tres tribunas de Vargas Llosa, Santos Juliá y Fernando Savater, tres grandes firmas de este periódico desgranando un día histórico". La vertiente más viva, lo que pase en el día, será también analizada por periodistas veteranos como Rubén Amón o Javier Ayuso. 

El 1-O es excepcional por lo que supone informativamente pero también por la estructura y despliegue a la que obliga. "Llevo 19 años en la web de EL PAÍS y nunca hemos preparado un dispositivo similar", explica Bernardo Marín, subdirector responsable de canales de información de EL PAÍS. "Hasta ahora, habíamos desplegado dos tipos de dispositivos para coberturas especiales. En primer lugar, aquellos acontecimientos a los que se les puede aplicar una escaleta porque sabes exactamente cuál es el plan previsto, como unas elecciones. En segundo lugar, el dispositivo que tienes que inventar sobre la marcha, cuando sucede algo completamente imprevisto como un atentado terrorista. El referéndum de Cataluña es un híbrido. Sabemos que algo va a pasar, pero no sabemos qué. Y por ello tenemos que barajar muchos escenarios. Lo importante es movilizar mucha gente y cubrir todos los tramos horarios y también máxima flexibilidad con los equipos".