La Super Bowl quiere de nuevo a Justin Timberlake

Cuando quedan poco más de cinco meses para la Super Bowl, Justin Timberlake es el nombre que más suena en las quinielas como el próximo cantante elegido para actuar en el mayor espectáculo televisivo de Estados Unidos. Un reto que no es nuevo para el artista, de 36 años, pues hace 13 protagonizó, junto a Janet Jackson, la controvertida actuación que marcó un hito en la historia: que la cantante mostrara un pezón instauró la censura y unos minutos de retraso en las retransmisiones en directo en la televisión estadounidense.

Lo que entonces adquirió el nombre de pezongate hace referencia al momento en el que Jackson enseñó un pecho durante el intermedio de la final de la liga estadounidense de fútbol americano en un espectáculo emitido en horario de máxima audiencia en febrero de 2004. Al final de la actuación, donde los cantantes simulaban un intento de seducción mientras interpretaban a dúo el tema Rock Your Body, Timberlake tiró del vestido de gladiadora que lucía Jackson y rompió —hicieron ver que sin querer— la copa que cubría el seno derecho de la artista, quedando este al descubierto antes los millones de espectadores.

Un momento que enfureció a los conservadores y promovió que la Comisión Federal de Comunicación regulara que a partir de entonces las transmisiones en director en Estados Unidos tuvieran un retraso de cinco minutos, tiempo suficiente para que los censores corten los excesos.

En caso de que Timberlake completase las negociaciones con la organización de la Super Bowl, que según US Magazine está en proceso, otro frente abierto de su nuevo espectáculo sería la posibilidad de reencontrase en el escenario con Britney Spears, con la que mantuvo una relación a finales de los noventa. Son muchos los que especulan, y anhelan a partes iguales, esa posibilidad.

Otros posibles nombres que suenan para actuar en el intermedio de la Super Bowl son Jay-Z o Christina Aguilera.