Shakibecca, la doble venezolana de Shakira
"Mi fin último es poder copiarme a mí misma y arrancar mi propia carrera", dice Rebecca Maiellano, que empezó a imitar a la cantante con 12 años
Su increíble parecido físico con Shakira ha convertido a Rebecca Maiellano en la doble oficial de la cantante colombiana y, con una combinación de su propio nombre y el de su ídolo, su show Shakibecca vende prácticamente todas las entradas para los conciertos que ofrece, de momento, en México.
La auténtica Shakira ya ha tenido la oportunidad de conocerla a través de un vídeo que le enseñaron en el programa de televisión Despierta América, de Univisión, y se mostró asombrada por su enorme similitud, incluso llegó a pensar que la que veía sobre el escenario era ella. “Shakibecca, me has dejado con la boca abierta, un beso muy grande. Lo haces increíblemente bien, en algún momento pensé que era yo, pero creo que lo haces mejor”, le mandaba un mensaje la intérprete de Me enamoré. Su doble y fan no pudo contener los gritos y lágrimas de emoción al oír las palabras de la cantante, como se puede ver en su cuenta de Instagram.
Y es que no solo se parecen en el físico, sino que la venezolana ha logrado imitar los bailes y calcar el mismo vestuario que luce la colombiana, aunque con menos recursos. “Yo no tengo los diseñadores internacionales de Shakira. A mí me hacen los trajes las modistas y estilistas de los programas de televisión de imitación, y como ves están más que logrados”, asegura en una entrevista telefónica con EL PAÍS.
Mantener la forma física y el aguante de Shakira no es fácil, y Shakibecca destaca que ha tenido que cambiar su estilo de vida. “Ahora me cuido mucho en la alimentación y voy al gimnasio casi todos los días, y, por supuesto, no faltan las abdominales, que son esenciales”, detalla.
Rebecca Maiellano, de 33 años, es natural de Venezuela y ya con 12 años comenzó a cantar las canciones de Shakira encerrada en su habitación. Aunque fueron sus amigos de escuela los primeros que le señalaron su gran parecido físico con la compositora, sus padres descubrieron su talento y la animaron para que se presentase a los concursos musicales de la televisión venezolana. Participó en Fama, sudor y lágrimas y en Buscando una Estrella, en este último personificando a Shakira donde, con solo 15 años, conoció por primera vez a la artista. Fue tal el éxito conseguido que la llamaron desde México para continuar sus imitaciones en Parodiando, el programa de imitación tipo Tu cara me suena de España, del canal mexicano Televisa. Y decidió instalarse allí.
Maiellano, que ya había comenzado a ganarse al público, compaginaba sus actuaciones en el programa con sus estudios de Periodismo, y no fue hasta los 29 años cuando comenzó a dedicarse profesionalmente a sus espectáculos bajo el título de Shakibecca. “Llevo ya cinco años con el show, pero de unos meses para acá ha sido el boom en todos sitios”, asegura. Y es que su experiencia encima de los escenarios ha llegado incluso a España. En 2005 Maiellano vivió un año en Ourense trabajando en una orquesta que viajaba por las fiestas de los pueblos gallegos. “España fue una época muy linda donde disfruté mucho y me gustaría volver con el show de Shakibecca”, asegura la cantante. Y aunque en este país no son tan comunes los espectáculos de imitadores, seguro que muchos la reciben con ganas, pues Shakibecca ya tiene un club de fans en Barcelona.
Sobre la fama que está alcanzando en tan poco tiempo, Maiellano destaca que aunque la mayoría de las respuestas son muy positivas, también ha visto el lado oscuro en quienes la increpan y acusan de plagiar a Shakira. “La carrera de la imitación en Latinoamérica es seria y es una manera de reconocer a los grandes artistas. Yo no soy Shakira, ni me disfrazo de ella por la calle. Solo me convierto en ella sobre el escenario”, asegura Maiellano sobre su actual profesión.
De hecho sabe que, como en todos sitios, en este mundo también existe la competencia. “Sé que hay otras Shakiras en otros países, como en Chile, donde Noelia Quiroz es muy reconocida también. Y yo me alegro de que seamos muchas porque eso significa que todas idolatramos a una magnífica artista”.
Maiellano es consciente de que su papel como Shakibecca es finito y, antes o después, le gustaría despegar como cantautora en solitario. “Mi fin último es poder copiarme a mí misma y arrancar mi propia carrera, pero me da miedo ofender a los fans de Shakibecca y que no sigan a Rebecca Maiellano”, explica. De momento ya tiene su primer sencillo en marcha, Como un Adiós, aunque no quiere adelantar cuándo lo enseñará a su público.
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