La gesta de la primera expedición al Polo Sur
Google rememora la hazaña de Amundsen con un ‘doodle’ especial
Pese a la enorme gesta, los miembros de la expedición no abundaron en festejos. “En estas regiones, uno pierde la costumbre de las ceremonias largas. Cuanto más cortas, mejor", escribió Roald Amundsen al referirse a la sobria celebración que él y sus compañeros hicieron, a 23 grados bajo cero, el día que conquistaron el Polo Sur. Y eso que fueron los primeros en llegar a ese punto del planeta: el 14 de diciembre de 1911. Este miércoles se cumplen 105 años de la hazaña y Google le ha dedicado su doodle para rememorarla.
Entonces, los componentes del grupo encabezado por Amundsen se limitaron, en cambio, a colocar una bandera —junto a un banderín de su barco, el Fram—; bautizaron con el nombre del rey noruego Haakon a la planicie donde se encontraba; montaron la tienda de campaña y sacrificaron a uno de sus perros, Helge. Apenas unos días después, tras recorrer los alrededores para asegurarse de que habían alcanzado el punto del Polo ansiado, la expedición puso rumbo a casa.
Hasta 1911, el Polo Sur era territorio desconocido. Hoy se cumplen 105 años de la llegada de la primera expedición #GoogleDoodle pic.twitter.com/stX0r6V0ib
— Google España (@GoogleES) December 13, 2016
Pero, detrás de la conquista del Polo Sur se esconde también un histórico enfrentamiento entre el noruego Amundsen y el británico Robert Falcon Scott, que llegó al mismo lugar solo 35 días más tarde. El primero había reunido a un equipo de experimentados esquiadores y utilizó perros de tiro para alcanzar su objetivo. Además, el nórdico decidió sacrificar a los animales más débiles y se los daba de comer a los más resistentes para asegurarse después el regreso.
Scott cometió, por su parte, un importante error estratégico: no quería matar a los canes, así que eligió ponies siberianos para el transporte. Aunque, sin embargo, varios estudiosos creen que consideraba un mérito mayor alcanzar el Polo Sur a pie, sin el tiro de los animales. De esta forma, cuando el británico llegó al punto deseado, se topó con la tienda de la expedición de Amundsen. Y, además, él y todos los componentes de su grupo murieron cuando trataban de regresar a casa, tras sufrir una de las peores tormentas polares del siglo, con fríos desorbitados y ventiscas interminables que minaron su resistencia. Los encontraron en sus tiendas seis meses después.
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