Mascotas abandonadas por la crisis económica en Venezuela

Tener una mascota en Venezuela se está convirtiendo en todo un lujo. El aumento de la pobreza y la escasez de alimentos están obligando a los venezolanos a abandonar sus animales de compañía en lugares públicos, como parques o refugios improvisados. José Contramaestre, encargado de una tienda de mascotas en Caracas afirma que "hay muchas personas que vienen a la tienda y cuando ven los precios, no compran alimentos ya que exceden el valor del salario mínimo". En la capital venezolana deambulan cientos de perros delgados buscando comida en los contenedores de basura.  "La crisis realmente ha golpeado duro. Hay dos motivos de abandono: el primero es que  la gente no puede mantenerlos porque no tienen dinero, y otro porque la gente está saliendo del país y no pueden llevar al animal con ellos. En lo que va de este año, es increíble el número de perros abandonados, perros con pedigree que pertenecían a una familia" asegura la activista venezolana María Arteaga, de 53 años, que comenzó a cuidar perros callejeros en su propia casa antes de fundar el refugio en los Teques, la capital del estado Miranda.