8 fotosProductos faciales que le dejarán peor que antes de usarlosPorque irritan, caducan o no se llevan bien con su piel. Aprenda cómo esquivar los problemas que acarrea la cosméticaSalomé García05 ago 2016 - 11:54CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceEl ingrediente más efectivo de las cremas antiarrugas es el retinol. "Favorecen la renovación celular, previenen la hiperqueratinización [el endurecimiento de la piel] y mejoran las arrugas finas y profundas, estimulando la producción de colágeno, elastina y fibronectina”, apunta Inmaculada Canterla, directora de Cosmeceutical Center. La mala noticia es que, si su dermis es sensible, puede irritarse y mucho. Un estudio de la Universidad de Ginebra (Suiza) evidencia que los retinoides de uso tópico suplen la deficiencia de la vitamina A en la piel, provocada por una exposición excesiva al sol o por el estrés. Una vez allí, su misión es plantar cara a los radicales libres. Pero, por otra parte, el efecto de esta sustancia sensibiliza la piel y provoca que sea más fácil quemarse. Solución: La experta recomienda dejar los tratamientos con retinol para las rutinas nocturnas.Los limpiadores jabonosos pueden dejarle la piel como la seda. O como una lija. Uno de los factores de los que depende esta gran diferencia es el agua. “En la costa mediterránea, el agua es muy dura, con mucha cal y eso altera el pH de la piel", apunta el farmacéutico Juanjo Trilla. Solución: "En esas regiones lo mejor es usar agua micelar para eliminar impurezas y exceso de grasa. No hace falta frotar ni aclarar y se puede usar de día y de noche”, aconseja.La acumulación de pieles muertas, sebo facial y suciedad diaria crea una capa que asfixia la epidermis y da aspecto macilento al rostro. Hay que retirarla, pero no todo vale. Si su piel es madura y seca, Trilla sugiere exfoliar solo una vez cada siete días. “Las pieles mixtas y las grasas requieren como mínimo dos exfoliaciones a la semana”. Antes de abalanzarse, sepa que hay varios tipos: "Los químicos, con fenol u otros ácidos como el glicólico, son muy efectivos para eliminar la capa más superficial de la piel pero son más agresivos”. Solución: Si tiene la piel sensible, evite abrasársela usando los exfoliantes más amables: “Los menos intensos son los mecánicos, los de 'toda la vida', con partículas que arrastran las impurezas. Lo habitual es que lleven granitos de hueso de albaricoque o minerales. Los enzimáticos son ideales para pieles sensibles porque disgregan las células muertas de la piel sin restregar". Si prefiere la eficiencia de los químicos, mejor no tomar el sol después, para evitar llenarse de manchas.Su piel envejece por el calendario. Pero lo hará a marchas forzadas si se expone mucho al sol. El fotoprotector solo bloquea el 55% de los radicales libres producidos por la radiación ultravioleta. El resto de la tarea depende de echar mano de antioxidantes, en especial, de la vitamina C en su forma más agresiva: ácido ascórbico. Este ingrediente, además, suaviza las manchas y anima a producir colágeno para obtener una piel más elástica. Pero todo tiene su lado oscuro: “El ácido puede irritar las pieles sensibles, especialmente en las altas concentraciones requeridas para la síntesis de colágeno”, advierte Canterla. Solución: Preste atención a los ingredientes. Si ve que este activo le produce rojeces, opte por otras fórmulas alternativas y más estables de vitamina C: “Un glucosido, un fosfato de ascorbil marnesio, un tetrahexildecil ascorbato…..”, recomienda la experta.Desde la Academia Española de Dermatología y Venereología, el doctor Román Barabash Neila recuerda que los protectores solares "suelen tener una vida útil de doce meses. No sirve el que se quedó a medio usar en la bolsa de la playa”. Incluso los que se encuentran en fecha pueden tener sus riesgos en algunas circunstancias, más allá de las complicaciones de la vitamina C: “Durante el embarazo, tras el parto o al tomar anticonceptivos orales se producen alteraciones hormonales que favorecen la aparición de manchas. Lo mismo sucede con algunos medicamentos”, advierte el dermatólogo Josep González de Castro, director del Instituto de dermatología Avanzada (Iderma). Solución: No recicle la crema de un año para otro y, en caso de encontrarse en una de estas situaciones, expóngase al sol lo menos posible.Un 'peeling' profesional puede hacer desaparecer las manchas superficiales del cutis. Pero en ocasiones pasa que, en un corto período de tiempo, aparecen en otros sitios. ¿Hora de demandar al doctor? “Hay manchas en capas profundas de la piel que no se aprecian a simple vista, pero están. Al retirar con el 'peeling' químico la capa superficial de la epidermis se harán evidentes”, explica la experta en belleza Maribel Yébenes Maribel Yébenes. Este tipo de procedimientos dejan la piel más vulnerable al sol y aumentan el riesgo de que surjan nuevas manchas. Solución: Si se realiza este tratamiento, huya del astro rey y aplíquese una protección solar alta (FPS 50).Los productos que contienen mentol tienen efectos tonificantes y refrescantes. “Funciona como un agente transportador transdérmico: al ser soluble en lípidos, cruza la barrera de la piel y puede llevar ciertas sustancias hasta las capas más profundas para mejorar su absorción. De hecho, por lo general, actúa como un agente calmante en la terminación nerviosa”, explica Canterla. Su parte negativa es que, dependiendo de la piel, "puede dar reacciones de sensibilidad”. Solución: Antes de embadurnarse con el producto, compruebe con pocas cantidades que le sienta bien. Si le irrita, abandone.Muchos productos cosméticos contienen alcohol por su acción limpiadora: "El pantenol (una forma de vitamina B5) es esencial para el metabolismo celular de grasas, carbohidratos y proteínas". Pero aquí vuelve a ser importante leer la etiqueta, no hay un solo tipo de alcohol: “Algunos como el isopropílico resecan”, explica Canterla. Solución: Si su piel es sensible, la experta recomienda que no se arriesgue: "El alcohol cetílico es graso, tiene una consistencia que se asemeja a la cera y es un maravilloso emulsionante”.