Modesta proposición
Ya hemos conseguido erradicar el topónimo Matajudíos. Prosigamos la labor: por ejemplo, Matalascañas (delito ecológico), Matacabras (maltrato animal), Las Matas (violencia de género). Incluso Mataespesa o Matalallana, que lo mismo aluden a alguien. Y no digamos de Guarromán. El caso es que impere la cursilería. Por cierto, el municipio de Los Cristianos debería al menos buscarse unas barriadas que bautizar como Los Musulmanes, Los Budistas, etcétera. También podemos renombrar todo en inglés. La tarea es ingente.— Miguel Bayón Pereda. Madrid.
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