De Balada de la dependencia sexual , de Nan Goldin, a Self Skin s Arquitecture un recorrido por obras que han dejado huella
Esta fotografía, extraordinariamente “realista”, muestra una imagen de repulsión –lo “abyecto” de Kristeva,- a la cual recurre Sherman cuando es consciente de que su intento de subvertir las estrategias de (re)presentación en sus autorretratos con disfraces ha fallado: el producto final sigue siendo agradable. Se trata siempre de escenas que remedan un fotograma, de ahí el título Still. Al fondo se distingue reflejada su imagen.Esta videoinstalación sonora está compuesta por una pantalla con tres paneles y tres canales de vídeo, donde se muestra un nacimiento, un cuerpo flotando en el agua y la muerte de una mujer que resulta ser la madre del artista. Se trata, pues, de una de las propuesta autobiográficas, tan de moda en los 90, en la cual lo “real” vuelve a tomar el protagonismo y plantea la pregunta sobre la ficción misma.Esta instalación fue una de las primeras obras de la llamada “crítica institucional”, al construir la sala de un museo con goteras en medio de atmósfera aséptica que suele reinar en las instituciones. En las paredes se contemplan los cuadros del artista-personaje S. Koshelev, con una biografía perfectamente construida y un lugar claro dentro del arte ruso, aún muy desconocido en Occidente y con tantos relatos y artistas por descubrir. De ahí el malentendido. La obra hacía reflexionar no sólo sobre el museo como institución, sino sobre la situación rusa de aquellos años.La estructura de metal con forma de araña, a la vez frágil –cada parte del supuesto animal construida como una línea- e imponente, juega con una metáfora que fascinaba a la artista: la idea de aquello que a la vez atrapa y cobija, con claras connotaciones a lo autobiográfico -los tapices de su familia- y la madre. A pesar de haber empezado a trabajar en el Nueva York de los 60, planteando problemas al Minimal, Bourgeois alcanza su éxito en los 80, siendo desde entonces un referente para los artistas más jóvenes.GARCÍA SANTOSEsta obra, presentada en el Pabellón canadiense de la Bienal de Venecia, plantea algunas cuestiones que van más allá del “arte sonoro”. A través de los sonidos que los espectadores perciben con unos cascos, en este como en el resto de sus producciones, juega con la percepción de la realidad: ¿dónde estamos? La obra se conforma a través de las narraciones, una de las áreas de experimentación más recurrentes en Cardiff, quien juega a “manipular” a los espectadores a través de los relatos. Esta impresionante propuesta de la artista colombiana para la sala de Turbinas de la Tate Modern de Londres, se relaciona con sus planteamientos que a menudo reflexionan sobre la situación política del país o la cuestión de las personas desplazadas por la guerra. También tiene algo de “crítica institucional”, ya que la obra pone en solfa el proyecto moderno de la arquitectura, masculino y occidental.Carmen ValinoEl colectivo indio, acrónimo en inglés de Rarely Asked Questions -cuestiones raramente preguntadas-, un guiño a las FAQS, Frequently Asked Questions, que encontramos en muchas páginas web- hablan de algunos de los cambios que han ido ocurriendo en la cultura a través de los nuevos canales de información. Se diría que no se limitan a “ser artistas”, sino que a través de su trabajo –comisariado, publicaciones de libros, instalaciones, programas educativos…- aspiran a refutar cierto determinismo impuesto por el pensamiento hegemónico y revisan las normas a través de medios inesperados y, sobre todo, siempre críticos.Pierre Huyghe se incluye en la categoría discutida y planteada por Bourriaud de “arte relacional”. En la Documenta 13 de Kassel reconstruyó, piedra a piedra, incluso las huellas de un camión en el barro, un paraje que creaba la sensación de abandonado y destruido y que exigía un mantenimiento constante –qué complejo mantener el orden en un caos programado-. Algunos de sus clásicos perros pintados observaban a los espectadores y se movían entre ellos.La propuesta que la escultora española hace para Toledo, representa cierta vertiente del llamado “arte público”. Partiendo del agua como hilo conductor, la artista propone un recorrido físico e imaginario por la ciudad y rehabilita lugares de una forma poética, confrontando al espectador con su mirada personalísima, donde la propia agua y la vegetación forman un territorio visual de desvelamientos y metáforas.Ismael Herrero (Efe)Las obras del artista francés de origen argelino, vuelven a los problemas de la colonización y el concepto de “reparación”, todo lo que necesita ser reparado en la cultura y la naturaleza, si bien en la cultura occidental se trata de un concepto poco habitual. Apropiándose en sus instalaciones de “objetos coloniales” propone esa estética de la “reparación” que se convierte en línea fundamental de su filosofía que revisa y traspasa las llamadas “propuestas poscoloniales”.
