Las petromonarquías tienen un problema de sobrepeso

Un día sí y otro también, los medios de comunicación de Emiratos Árabes Unidos (EAU) advierten de los peligros del sedentarismo y animan a la población a ejercitarse. Es una campaña consciente y concertada con las autoridades para hacer frente a la epidemia de obesidad y diabetes que sufre la región. En las dos últimas décadas, el exceso de peso ha aumentado a un ritmo alarmante en los países árabes del golfo Pérsico, en especial entre las mujeres.

Cuatro de ellos se encuentran entre los diez con las mayores tasas de obesidad del mundo, según la Organización Mundial de la Salud. Kuwait es el más afectado con un 42,8% de su población considerada obesa. Pero los vecinos Arabia Saudí y Qatar no le andan a la zaga con un 35,2% y un 33,1%, respectivamente. Si se les suman las personas con sobrepeso, los porcentajes están entre el 66% y el 74% para los hombres y entre el 71% y el 77% para las mujeres.

Esas naciones han vivido un aumento exponencial de la riqueza ligado a la explotación del petróleo a partir de los años sesenta del siglo pasado. El desarrollo industrial, la rápida urbanización y la mejora de las condiciones de vida han ido unidos a un cambio de hábitos que incluye desde la generalización del coche hasta la popularidad de la comida rápida al estilo americano. Así que a la vez que se reducía el ejercicio físico, se aumentaba el consumo de calorías.

Es habitual cruzarse con ciudadanos orondos. Pero a las autoridades no les preocupa la estética, sino los problemas de salud asociados, en especial la diabetes, que tiene una gran prevalencia en la zona. En una reciente conferencia sobre el asunto en Riad, las seis petromonarquías decidieron formar un comité para recoger datos y coordinar esfuerzos en la promoción de vidas saludables como mejor forma de prevención.

El tiempo corre en su contra, ya que muchos jóvenes ya son víctimas del problema. Entre el 5% y el 14% de los niños y adolescentes, y entre el 3% y el 18% de las niñas y adolescentes de la región, son obesos.