Extenuante perfección
A los famosos de las redes sociales se les desacredita por ser cuarto de discurso y tres de 'selfies'
Los secretos de Grace
Cuando se estrenó en Cannes, la película Grace de Mónaco, en la que Nicole Kidman interpreta a Grace Kelly, el filme se recibió con sonrisas. El pasado lunes se emitió en Lifetime, canal especializado en telefilmes de sobremesa. Y ¡su calidad! se transformó en morbo. “Es tan mala como irresistible: mejorarla sería destrozarla”, calificó uno de los críticos de televisión de The New York Times. La emisión fue acompañada de otro espectáculo: el guionista del filme, Arash Amel, fue narrando las catástrofes diarias del rodaje en Twitter. La familia real monegasca vetó las tramas del divorcio de Grace y Rainiero. Y hubo peleas diarias sobre cómo concluir la película.
“Guay es un estado mental”
“Me estoy comiendo la tarta más grande del Imperio malvado en una galaxia muy, muy lejana”. “Vale… Ser más vieja que Matusalén / Es un asco / Pero ser guay es un estado mental… especialmente si / lo petas en la gala del MET / Cuando se es diva…”. Son solo algunos ejemplos de uno de los rincones más abracadabrantes de Internet: el Twitter de Cher. La cantante, de 69 años y disléxica, tuitea sin control ni filtro. El resultado es una maravillosa concatenación de boutades, sin orden ni concierto. Un monumento al libre albedrío.
Extenuante perfección
A los famosos de las redes sociales se les desacredita por ser cuarto de discurso y tres de selfies. Por tener milagrosas cuentas en Instagram que convierten poses estudiadas y ángulos mágicos en cuerpos inalcanzables. Romy Greenstein, estudiante de la Universidad de Leeds (Inglaterra), juega a convertirse en uno de ellos. Según escribe en la web universitaria The Tab, imitó al dedillo las poses icónicas de esta “especie”: Kim Kardashian en la cama haciendo morritos, Niki Minaj ante el espejo, posaderas en pompa… Sus seguidores se multiplicaron tanto como su estrés. “Aparentar la perfección a diario resulta extenuante”, admitió.
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