Madrid, ciudad sitiada
El pasado jueves he visto a una ciudad sitiada por la policía. He visto cómo se impedía la libre circulación de los ciudadanos, cómo se tomaban plazas y calles, cómo se registraban bolsos y mochilas indiscriminadamente, cómo se retiraban banderas republicanas donde se encontraran, incluso de las terrazas de viviendas particulares, cómo se cortaba el paso a toda persona que portara cualquier emblema, chapa, camiseta, diferente a la bandera española. Y mientras tanto, he visto también, a un expresidente de Gobierno, el socialista Felipe González, que delante de las cámaras de televisión expresaba, ante todo y por encima de todo, su preocupación por “La Roja” a la que “en estos momentos tan difíciles daba todo su apoyo”. Sin comentarios.— Sebastián Navarrete Molina.
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