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Guerreros de la naturaleza Dedican su vida al planeta. A los océanos, a la fauna y la flora amenazadas. A bordo del Rainbow Warrior o en la selva de Tanzania, son hombres y mujeres que combaten en las trincheras del medio ambiente Varios miembros de la tripulación del Rainbow Warrior III a bordo de una de las lanchas rápidas que utiliza Greenpeace para sus acciones en alta mar. Al fondo, el velero de la organización ecologista, fotografiado el pasado abril en el canal de la Mancha. Carlos Spottorno El Rainbow Warrior III llega al puerto de Ámsterdam (Holanda), donde tiene su casa, tras cerca de tres años de navegación por todo el mundo. El velero fue construido en 2011. Carlos Spottorno Desde su fundación, Greenpeace ha sufrido dos grandes crisis con sus barcos, y en ambas ocasiones el capitán era Peter Willcox (Norwalk, EE UU, 1953). Bajo su mando, el Rainbow Warrior fue hundido en Nueva Zelanda en 1985 de mano de los servicios secretos franceses, cuando la organización ecologista luchaba contra las pruebas nucleares que Francia realizaba en el Pacífico. El año pasado, Rusia confiscó el Arctic Sunrise (aún varado en Murmansk) y detuvo a sus 30 tripulantes durante tres meses bajo acusación de piratería, tras el intento de éstos de encaramarse a una plataforma petrolífera rusa: “Franceses y rusos cometieron el error de darnos más publicidad”. Carlos Spottorno Solo lleva año y medio en Greenpeace, y en su primera misión con la organización ecologista pagó el precio de ser activista. Anne Jensen (Høje Taastrup, Dinamarca, 1987) es parte de los Arctic 30, las 30 personas detenidas tras el intento de asalto a una plataforma petrolífera rusa en septiembre del año pasado en el mar de Pechora. “Es difícil saber si repetiría o no la experiencia de pasar tres meses en la cárcel. Si pienso en mi familia, en lo mucho que sufrieron, dudo… pero probablemente sí volvería a protestar por la extracción de petróleo en el Ártico. Porque llamamos la atención de la gente, trajimos el asunto al debate, y eso es importantísimo”. Carlos Spottorno Galardonada por Naciones Unidas, la Unesco, o con el Príncipe de Asturias entre otros, Jane Goodall (Londres, Inglaterra, 1934) ha dedicado toda su vida a la defensa de los primates, principalmente en Gombe (Tanzania). Hoy vive más activa que nunca: “Viajo más de trescientos días al año. No puedo parar. Cuanto más cerca estoy de mi muerte, más urgencia tengo por expandir el mensaje. El ser humano hace tiempo que perdió la sabiduría de tomar las mejores decisiones para el futuro. Salvar los chimpancés significa salvar los bosques. Y salvar los bosques, como los océanos, es lo más importante, porque ambos son clave para absorber el dióxido de carbono de la atmósfera”. Enno Kapitza (Agentur Focus) La obsesión de Vandana Shiva (Dehradun, India, 1952), física y filósofa, empezó en 1984, cuando explotó una fábrica de pesticidas en Bhopal matando a miles de personas. A partir de esa experiencia, decidió crear los bancos de semillas (tiene más de 120 en la actualidad) “para rescatarlas, conservarlas y potenciar la agricultura ecológica” frente a multinacionales químicas como Monsanto, “que tratan de privatizar y controlar lo que comemos”. Shiva fue pionera en la lucha contra los alimentos transgénicos: “Es falso que sirvan para alimentar el mundo. Las grandes corporaciones de la agricultura solo piensan en los beneficios y agravan la malnutrición y el hambre”, asegura. Walczak (Laif) Firme defensor de “la creación de reservas marinas que ayuden a la recuperación de los stocks de peces en el mar”, Daniel Pauly (París, Francia, 1946) es un prestigioso biólogo marino y profesor en la Universidad de British Columbia (Canadá). “Apenas un 1% del mar está protegido. Es muy poco. Necesitamos dejar de pescar al ritmo en que lo estamos haciendo. En 2048, si seguimos así, la pesca estará colapsada, es decir, quedará menos de un 10% de peces de los que llegó a haber. Hoy en día ya estamos en peligro. En las zonas costeras, por ejemplo, los peces grandes se han reducido un 90%, y en alta mar las cifras se creen que han bajado entre un 50% y un 80%”. Anna Nance “El bosque es el supermercado y la farmacia de millones de congoleños”, afirma rotundo René Ngongo (Goma, República Democrática del Congo, 1961), biólogo, ecologista y quizá el mayor defensor de la selva del Congo, la segunda más grande del mundo tras la Amazonia: “Es un pulmón del planeta y es vital en la lucha contra el cambio climático”. Merlijn Doomernik El expresidente de Maldivas, Mohamed Nasheed (Malé, Maldivas, 1967), teme que la subida del nivel del mar haga desaparecer su país, mil islas cuya altura máxima no llega a los 2,50 metros: “En los últimos años hemos tenido que realojar a los ciudadanos de 16 islas. El petróleo es el pasado. Necesitamos energías renovables para detener el cambio climático”. Polaris