Cerco a la película sobre Strauss-Kahn

Vincent Maraval conoce bien el negocio de la distribución cinematográfica, como directivo de la productora y distribuidora internacional Wild Bunch. Pero es en calidad de productor de la película Welcome to New York, sobre la caída en desgracia de Dominique Strauss-Kahn (DSK), que ha denunciado las dificultades experimentadas durante el rodaje y las presiones de la industria del cine para limitar la difusión del filme.

En una entrevista con el diario Le Journal du dimanche, Maraval afirma que no es tal la apertura de mentes que se le presupone a su país: "En cualquier parte del mundo se pueden hacer películas como El caimán, sobre Berlusconi [Nanni Moretti], o Fahrenheit 9/11, sobre George W. Bush [Michael Moore], sin problema. En Francia no conseguimos hablar de la historia en curso. Con frecuencia, hay que esperar decenios para poder hacerlo".

El productor denuncia que "ninguna cadena de televisión francesa [habituales en el pool de productores de una película] ha querido financiar" el filme, que tuvo que recurrir, además de los fondos de Wild Bunch, "a la ciudad de Nueva York y a una sociedad de tres inversores particulares" para reunir los tres millones de dólares que ha costado.

"Todo el mundo nos desaconsejó rodar la cinta: tanto nuestros amigos como nuestros enemigos", dice Maraval en la entrevista publicada por el Journal du dimanche. Según él, Dan Franck, cercano a la expareja formada por DSK y Anne Sinclair, lo amenazó, en una cena con varios invitados presentes, en estos términos: "Que sepas que Anne Sinclair [exesposa de DSK] invertirá toda su fortuna para destruir tu vida".

Citando a la empresa UGC, dueña de una amplia red de salas de exhibición y a su vez distribuidora cinematográfica, Maraval afirma que dicha compañía "intenta evitar que la película salga en las pantallas de Bélgica, presionando a los exhibidores". Además, según el productor, "dos medios colaboradores" le han pedido que retiren su logo de los carteles, lo que considera "alucinante".

Alain Sussfeld, director general de UGC, ha respondido a Maraval afirmando, en declaraciones a la Agencia France-Presse, que "en el momento en que una película no da prioridad a la sala de cine para su exhibición, UGC no garantiza su difusión en ningún territorio". Wild Bunch anunció hace un mes que, en Francia, la película sería difundida en vídeo bajo demanda. El productor no ha explicado si ello se debe a la imposibilidad de asegurar el circuito de distribución convencional con suficientes copias o a una decisión voluntaria de obviar los cines en favor de Internet. Lo que sí está claro es que la cinta será presentada al mercado de Cannes y exhibida el sábado 17 en diferentes salas de la ciudad durante el festival. A partir de medianoche, estará disponible en la plataforma FilmoTV.

La cinta de Abel Ferrara, protagonizada por Gérard Depardieu y Jacqueline Bisset —la actriz Isabelle Adjani renunció a participar— no obvia el incidente que produjo la detención de Strauss-Khan por supuesta agresión sexual contra la camarera del hotel Sofitel de Nueva York Nafissatou Diallo, pero centra, según Maraval, la historia en el hundimiento del matrimonio entre el exdirector del FMI y Anne Sinclair. El momento, ahora que DSK intenta rehacer su vida como dueño de una firma de gestión de capitales, no es el más adecuado para la rehabilitación política de quien fuera considerado promesa y potencial candidato presidencial del Partido Socialista francés.

En su reseña —mayoritariamente positiva— sobre la película, Scott Foundas, crítico de cine de la prestigiosa revista Variety, sostiene que "está claro desde el principio que Ferrara concibe el caso de DSK no tanto como un incidente aislado sino como un elemento representativo: un eslabón de una larga cadena de decadencia capitalista y de explotación del Tercer Mundo por el primero".