Nace una red social para voluntarios

Esta entrada ha sido escrita porPablo González-Pola, de HelpUP (@HelpUP_es).

El reparto de alimentos a personas sin techo es uno de los proyectos que ofrece HelpUP.

"Cambiemos el mundo, proyecto a proyecto": este es el lema deHelpUP,la primera red social para hacer voluntariado. Es un sitio donde las entidades sociales suben sus proyectos para que los usuarios de esta red puedan colaborar como voluntario o mediante una simple donación. La simplicidad de esta página está en que son únicamente proyectos, proyectos con los que el usuario se pueda sentir identificado para colaborar de cualquier manera y a la vez un sitio donde encontrar a otras personas con las mismas inquietudes y ganas de cambiar el mundo.

Esta idea, hoy ya convertida en realidad, nació hace dos años por una necesidad. La simple necesidad de encontrar una acción social donde pudieran colaborar unos amigos. Hace dos años llevábamos ya cada uno tres años trabajando en nuestros puestos profesionales: abogados y economistas, despachos y bancas de inversión. Desde luego nada que ver con HelpUP y por más que alguna vez habíamos colaborado en algún proyecto social no era la razón que movía nuestras vidas ni mucho menos. Tal vez las ganas que tienes de cambiar el mundo cuando empiezas la universidad las fuimos perdiendo según fuimos ascendiendo profesionalmente.

Esto cambió una noche en mitad de una fiesta (una gran fiesta para ser sinceros) en el piso de unos amigos cuando llamamos a una chica para que se apuntara a la fiesta y nos contestó lo que no nos podíamos imaginar: Que no podía venir porque estaba repartiendo bocadillos y café caliente a los indigentes en la calle. ¿Un sábado por la noche? En vez de venirse a un fiestón? Eso marcó un punto de inflexión. Al día siguiente, el típico domingo ansioso, decidimos que ya estaba bien de mirarnos el ombligo, que no pasaba nada por hacer algo como esta chica. Así que entre el grupo de amigos creamos un grupo que llamamos “ Un domingo al mes para los demás”. Un domingo al mes un grupo de amigos y un sitio donde ayudar. Poco a poco se fueron apuntando amigos y amigos de amigos y el grupo se hizo incontrolable porque éramos incapaces de encontrar un sitio donde poder ir todos y lo más raro es que no encontrábamos dónde buscar. Si no estás metido dentro del circulo es complicadísimo encontrar algo y ahí fue cuando decidimos que había que normalizar la cooperación o colaboración entre los ciudadanos, que tenía que ser algo normal, de fácil acceso, que conociera todo el mundo y al que pudiera acceder todo el mundo. Ahí fue cuando decidimos crear una red social para la cooperación.

Tomamos la decisión de crear esa red pero con nulos conocimientos informáticos era complicado a sí que en el tiempo libre que teníamos de nuestros trabajos nos pusimos a preparar prototipos linkeando power points y Excel como locos (nos reuníamos los miércoles a las 22.00 y los fines de semana), organizando reuniones con organizaciones para ver que les parecía la idea, con voluntarios de esas organizaciones y con gente que no había hecho nunca voluntariado pero que les gustaría hacer.

Después de unos meses así decidimos que si no nos centrábamos 100% en el proyecto iba a resultar imposible que funcionara a sí que a pesar de los discursos familiares y desconfianzas de nuestros por entonces jefes fuimos progresivamente dejando nuestros trabajos. En ese momento teníamos una idea que creíamos que iba a funcionar, muchos prototipos, el dinero que habíamos conseguido y unas renovadas ganas de cambiar el mundo que por fin habían vuelto. Así que nos pusimos manos a la obra: intentamos buscar financiación para pagar la página hasta que nos dimos cuenta de que si no lo poníamos nosotros iba a ser imposible, así que invertimos la mayor parte de los ahorros en la página mientras seguíamos con reuniones con todas las organizaciones que podíamos y empresas interesadas en la acción social. En ese momento era una cuestión de fe nuestra en la página más que nada. Arriesgarlo todo sin tener nada claro.

Esto fue así hasta que a finales de Enero sacamos la página y de repente empezó la locura (obviamente es una red social para colaborar, no para ligar… un boom es imposible) en estos 2 meses tenemos más de 50 organizaciones registradas en la página ( las tres primeras la verdad es que prácticamente se lo teníamos que pedir de rodillas) con más de 100 proyectos en los que colaborar, casi mil usuarios registrados y lo más gratifícante de todo: Hemos conseguido que 110 personas hayan encontrado sus proyectos en los que colaborar en España, Costa Rica, Haití, Nicaragua, Guatemala, India, China, Tailandia, Vietnam, Burundi o Tanzania. Estas 110 personas están contribuyendo a cambiar el mundo a través de nuestro proyecto y es por lo que realmente merece la pena todo el trabajo hasta ahora.

Tenemos pensado abrir una “delegación” en Chile dentro de pocos meses para poder dar a conocer esta plataforma también en Sudamérica, que no se quede solo aquí. Que se puede, que si nosotros lo estamos haciendo lo puede hacer todo el mundo.