La historia de Tepsy Ntseoane, una de las 231.000 personas beneficiadas por la reforma agraria aprobada en los años noventa por el Gobierno de Nelson Mandela para la restitución y la distribución de la tierra en la Sudáfrica post-apartheid.
La granja de Ntseoane, de casi 600 hectáreas, forma parte de la política de corrección de desequilibrios e injusticias históricas de la Sudáfrica post-apartheid. En 2006 el Gobierno compró las tierras a un granjero blanco y le transfirió la gestión a esta mujer con unas condiciones ventajosas.JORDI MATASEn la granja hay plantaciones de millo y 136 cabezas de ganado. Ntseoane paga al Gobierno una renta que supone el 6% de sus beneficios.JORDI MATASLa familia de Ntseoane no proviene de un ambiente rural y de hecho ella ha llegado al sector agrícola de rebote, tras trabajar durante años en el mundo del 'catering'.JORDI MATAS“Es mi negocio, solo mío”, explica Ntseoane riendo. Su marido la siguió a regañadientes y hoy vive en la granja, ajeno al negocio y las tribulaciones de su esposa.JORDI MATASHannes Kruger, tataranieto de Paul Kruger, líder bóer y quinto presidente de la República Sudafricana de finales del siglo XIX, desde hace tres años trabaja para Ntseoane. Es su mano derecha en la granja.JORDI MATAS