Paco de Lucía, in memoriam
Me encontraba leyendo EL PAÍS, como cada mañana, cuando oí por la radio, a las nueve, la tristísima noticia del fallecimiento de Paco de Lucía.
Entre el aluvión de elogiosos adjetivos que se le han prodigado tan merecidamente, espero sumar los que, sin duda, serán expresados hoy en su periódico, porque verba volant, scripta manent.
De entre todo lo escuchado, me ha parecido enormemente poético lo que solía decir el maestro que, según parece, no había estudiado música cuando veía una partitura: “Son pajaritos en los alambres de la luz”.
Si ese símil metafórico que salió de su boca es poesía, lo es más aún la que salía de sus dedos, afinadas aves cantoras en los “alambres” de su guitarra.Me viene a la memoria un verso de otro andaluz irrepetible, Juan Ramón Jiménez: “Y yo me iré y se quedarán los pájaros cantando”.— Teresa Gallego Pérez.
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