La escenificación de un desarme
En la fotografía del remedo de desarme que ETA ha escenificado estos días observamos que en la pared han colocado una lámina del Guernica, y se hace imposible entender el relato que los encapuchados intentan transmitir con este detalle contradictorio.
El Guernica fue pintado por Picasso en 1937, impactado —como el mundo entero— por el bombardeo indiscriminado de esta villa vasca y respondiendo a un encargo del Gobierno de la República española para ser expuesto en el pabellón español de la Exposición Internacional. Este cuadro simboliza el dolor y el sufrimiento que representa la guerra para los pueblos. Que ahora, los mismos que impulsaron la “socialización del dolor” mediante atentados indiscriminados nos lo muestren como icono resulta inaceptable.— Gonzalo O. Castromonte.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.