Justo Aki, la zapatería vegetariana

Por Gema Gómez, de SlowFashionSpain

Hoy hablamos con Sergio, el emprendedor detrás de Justo Aki, una tienda de calzado en Bilbao cuya principal razón de ser es el respeto de los animales, ofrecer “zapatos vegetarianos”.

¿Qué es Justo Akí ?

Es más que una tienda, es un proyecto serio que con mucha ilusión y esfuerzo llevamos a cabo para ofrecer alternativas éticas y sostenibles. Con nuestra premisa "No hace falta matar un animal para hacer un zapato" encaminamos nuestra andadura, ofreciendo no sólo calzado sin ningún componente de origen animal, sino intentando que además sea ecológico y que sea realizado en las mejores condiciones de trabajo posibles actualmente.

¿Qué os animó a lanzaros en un proyecto que tiene que ver con ecología y ética?

Demostrar que existen alternativas y que se puede consumir de una forma más respetuosa con el planeta y sus habitantes. Elegí el calzado porque resulta muy significativo dentro del mundo de la moda, en lo que se refiere al impacto en los animales, el medio ambiente y las condiciones de trabajo. El objetivo principal es concienciar y ¿qué mejor que con el ejemplo?, por ello se llevó a cabo este proyecto.Y no solo con respecto al calzado, este es un espacio abierto de intercambio de inquietudes, ya sean moda, alimentación, consumo.

¿Cuánto tiempo lleva abierta "Justo Aki"?

Poco más de dos años. Abrimos la persiana el 1 de noviembre de 2011, coincidiendo con el día Mundial del Veganismo.

 ¿Qué tipo de cliente se acerca a vosotros?

Principalmente personas cercanas a la filosofía del proyecto, aunque también muchas compran simplemente porque algo les gusta. Lo positivo es que estas últimas en muchos casos preguntan y tiempo después vuelven buscando más información.

¿Has notado cambios en tu clientela desde que empezaste?

Sí y pienso que hay personas que se acercan con interés, ciertas inquietudes y al ver que existen alternativas y se puede vivir de un modo más respetuoso, tiempo después empiezan a introducir cambios en su estilo de vida.

¿Han evolucionado los derechos de los animales en estos últimos años?

No, los derechos de los animales son inexistentes, se les considera y se nos enseña que son cosas para nuestro beneficio.Sólo en los casos en que los humanos pueden beneficiarse de ellos y no vayan contra sus intereses, se les conceden ciertos derechos, pero siguen siendo los humanos quienes deciden que derechos se les concede o no.

Hablar de derechos consiste en hablar de condiciones más o menos favorables, y no se trata de ofrecer mejores condiciones para ellos, sino del respeto a la vida y la libertad y esto no es una cuestión política o de leyes, sino de conciencia y decisión personal.

¿Crees que vegetarianos y veganos son un "nicho de mercado" interesante y en crecimiento para emprender?

Quizá todavía es pronto como para considerarlo un nicho de mercado interesante en términos económicos, aunque cada vez son más las personas vegetarianas y veganas, pasará mucho tiempo hasta que ser vegetariano o vegano esté normalizado. Algunas grandes marcas ya empiezan ofrecer productos para este público, eso quiere decir que las cosas están cambiando.

¿Qué materias interesantes han surgido en estos últimos años para calzado que sean a la vez sostenibles y éticas?

Destacaría la microficha italiana, hay varios tipos en función de los fabricantes y sus patentes, pero todas destacan por su calidad y características no solo similares al cuero, sino superiores. En navegación, motociclismo, calzado de seguridad es muy habitual encontrar este tipo de materiales. Hay desde microfichas fabricadas íntegramente con materiales reciclados, en base algodón o compuestos con fibras vegetales y sintéticos biodegradables. Algunas de las marcas con las que trabajamos y que usan estas materias y otras que no sean piel animal son: Vegetarian Shoes, Nae Vegan, Natural World Eco, Bioworld Shoes.

¿Animarías a otros emprendedores a lanzarse a una experiencia similar?

Solo si la filosofía del negocio forma parte de su forma de vida. Si su objetivo principal es ganar dinero, mejor que se dediquen a otra cosa, ya que por principios se rechazan muchas oportunidades de negocio. Los márgenes son mucho menores y, salvo que tengas un activista dentro, probablemente en un tiempo acabes dedicándote a otra cosa más lucrativa.

¿Qué consejo se te ocurre para los y las profesionales que están empezando en este sector?

Paciencia, mucha paciencia y vistas a largo plazo, hasta dentro de unos años el mercado ético y responsable seguirá siendo minoritario. 

¿Cuáles son vuestros planes de futuro?

De momento poder seguir abriendo la persiana todos los días que con la que está cayendo y lo que nos están apretando los políticos, ya es todo un logro. El “sueño” de Justo Akí es crecer y poder abrir más tiendas en otras ciudades con el fin de ofrecer alternativas éticas, en un centro de trabajo donde las personas puedan hacer activismo a la vez que ganarse la vida, que no existan nunca diferencias de salarios entre las personas que formen parte del proyecto y destinar los beneficios a diferentes causas ya sean animalistas, sociales o ambientales. También queremos ofrecer cada día alternativas más éticas que las anteriores, porque siempre quedan cosas que se pueden mejorar. Esto es sin duda algo importante si no queremos perder nunca el espíritu por el que el proyecto se creó. En pocas palabras que la plusvalía que generemos por nuestro trabajo, una vez cubiertas nuestras necesidades básicas, no se la quede nadie, sino que la utilicemos para que la filosofía de la tienda se extienda.