El papa Francisco y los jóvenes
Acaba de celebrarse la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro. La elección del papa Francisco y su encuentro con los jóvenes en Brasil ha puesto de manifiesto su talante profundamente evangélico. Francisco, con una gran libertad de espíritu, ha adaptado el ministerio papal a su estilo personal y a sus convicciones. Un hombre inteligente y sencillo, cercano a la gente, coherente y libre de protocolos, un hombre de Dios.
Los jóvenes están cansados de doctrinas y de grandes discursos teológicos. La juventud quiere testigos de la fe, quiere una palabra que le llegue al corazón, quiere un pastor que aporte el brillo de la ternura y el vigor de una vida sencilla, austera, pobre, solidaria y comprometida con los problemas del mundo. Con el papa Francisco se abre la esperanza de que los jóvenes recuperen la credibilidad en la Iglesia.— Fernando Bermúdez López. Alguazas, Murcia.
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