¿Hasta cuándo?
Ante la nueva amenaza del Gobierno de la Generalitat de despedir a cerca de 20.000 funcionarios interinos y laborales, sorprende que el propio Gobierno siga manteniendo los privilegios de los ex presidentes, los sueldos y dietas estratosféricas de los consejeros, directores generales, parlamentarios, presidente, etc.
Mantenga el personal eventual (elegido a dedo), perpetúe entidades, consorcios, fundaciones y empresas públicas creadas ad hoc para colocar a los amiguitos y no reclame judicialmente contra los gobernantes del tripartito por el agujero millonario que dejaron en la caja de la Generalitat. Se llenan la boca de democracia pero sólo vemos que no hay ningún político corrupto en la cárcel y encima les tenemos que pagar la fiesta de sus excesos. ¿Hasta cuándo tenemos que aguantar?— Anna Ribes.
