_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Corrupciones

Al final, si no fuera por las corrupciones rampantes, seríamos ricos, además de pacifistas de corazón y antinacionalistas auténticos

Juan José Millás

¿Por qué, si nadie habla bien de los nacionalismos, el mundo está lleno de nacionalidades? Quizá por las mismas razones por las que, detestando las armas, los españoles nos hemos gastado 30.000 millones de euros en un arsenal que según Constantino Méndez, secretario de Defensa con Zapatero, no vamos a usar. Esas armas, añadió, están pensadas “para escenarios de confrontación que no existen y las hemos comprado con un dinero que no teníamos entonces ni tenemos ahora”. Lo más probable es que al tiempo de hacer estas declaraciones estuviera firmando la adquisición de siete tanques y cuatro submarinos, todo a cuenta del contribuyente. Ya ven en qué se nos ha ido el dinero que hurtamos a la educación. Se nos fue una tarde en la que alguien decidió calmar su ansiedad y la de sus comisionistas con la compra de una partida de fusiles que seguramente había puesto a la venta, ¡casualidad de casualidades!, un tal Morenés, actual ministro de Defensa. ¿Es o no es todo una mierda? Dentro de 20 años, nuestros nietos todavía estarán pagando los intereses de esa operación. Y todo porque a un pacifista le dio por armarse hasta los dientes como a los antinacionalistas les da por crear nacionalidades. Otra cosa con muy mala fama es la política. Dices de una huelga que es política y ya la has descalificado. Es lo que ha hecho el ministro Wert con la de padres de alumnos. Sin embargo, no le hemos escuchado todavía quejarse de la politización de las cajas, fuente de financiación de toda clase de chorizos. Ahí, en las cajas, hay otro agujero de 30.000 millones que también estamos apoquinando a escote. Ya van 60.000. Y no hemos incluido Gürtel ni Nóos ni los ERES de Andalucía ni los campeones de Galicia… Al final, si no fuera por las corrupciones rampantes, seríamos ricos, además de pacifistas de corazón y antinacionalistas auténticos.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Juan José Millás
Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, además del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_