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3.500 Millones
Coordinado por Gonzalo Fanjul y Patricia Páez

100 ONG piden al FMI elecciones limpias para sustituir a Strauss Kahn

Gonzalo Fanjul

Cien de las organizaciones activistas más importantes del planeta (incluyendo a Oxfam, Action Aid o el Bretton Woods Project) remitieron esta semana al consejo del FMI una cartasolicitando lo evidente: que el proceso de elección del nuevo director/a general de la institución sea abierto y democrático, y que además esté basado en los méritos del candidato/a y no en el músculo financiero de sus padrinos. Dicho de otro modo, justo lo contrario de lo que han propuesto en bloque los países europeos con la candidatura de Christine Lagarde.

El FMI -junto con otras instituciones financieras internacionales como el Banco Mundial- conserva una democracia de tipo colonialista, en la que un grupo de blancos occidentales y adinerados deciden la suerte de la mayoría a golpe de acciones. El conjunto de países europeos (representados de forma individual) conserva un 32% de las acciones de esta institución, seguidos de EEUU con un 16,7%. Gracias a este poder, ambas potencias se han repartido durante más de medio siglo las direcciones del FMI y del Banco Mundial, del mismo modo que las bandas se reparten los barrios.Es difícil exagerar la influencia extraordinaria que han ejercido desde estos cargos en el destino de millones de personas en decenas de países pobres, imponiendo medidas draconianas como el recorte en la salud o en la educación que en ningún caso hubiesen aceptado en sus propios países.

El problema es que el mundo ha cambiado algo desde 1944 y Europa parece ser la única que no se ha dado cuenta. Varias de las grandes potencias emergentes (Brasil, India, China, Rusia y Sudáfrica)han exigido hace pocos días baraja nueva y cambio de reglas. Al igual que las ONG, quieren un proceso democrático y transparente, que podría ser resuelto, por ejemplo, exigiendo una doble mayoría de acciones y países miembros (de los 187 que lo componen), así como audiencias públicas que incluyan la participación de otras organizaciones internacionales y no gubernamentales.

Pero no basta con mejorar el procedimiento. Eso que denominamos vagamente "los méritos" del candidato/a esconde interpretaciones muy diferentes. Para Europa y EEUU, el FMI debe continuar siendo el perro guardián de la ortodoxia económica, impuesta desde fuera cuando sea necesario.A pesar de su fama de dirigente progresista, Strauss Kahn no fue una excepción a esta regla. Como recuerda P. Chowla en el blog IMFboss.org, tres de cada cuatro acuerdos promovidos por el FMI como respuesta a la crisis y a la recesión económica contenían políticas 'pro-cíclicas' (es decir, lavativas fiscales como las aplicadas a Grecia). Los movimientos de esta institución en las grandes reformas pendientes, como la fiscalidad internacional o la transparencia y el control del sistema financiero han sido bastante menos que impresionantes.

Así que este blog se alegra mucho del cosmopolitismo de la candidata europea, pero espera que el nuevo director/a general del FMI sea elegido/a por otros méritos, incluyendo la independencia política y la legitimidad moral. Muy particularmente, por su capacidad para comprender que hasta ahora esta institución financiera ha sido una parte mucho más importante del problema que de la solución.

(Todos los detalles del nuevo procedimiento que proponen las 100 ONg están disponibles en el documento Heading for the Right Choice: A professional approach to selecting the IMF boss).

Comentarios

Sería bueno aprovechar la situación para cambiar cómo funciona y cual debe ser su objetivo en este momento. Al principio fue creado para promover la estabilidad económica, pero ahora parece que su principal preocupación es servir a los intereses de la comunidad financiera: en realidad, ha promovida políticas, como la liberalización del mercado de capitales, que han acentuado la inestabilidad global. Es inadmisible que, a pesar de sus numerosos errores, se considere infalible. Y, siendo como es una institución pública, me parece inadmisibles su falta de transparencia; su obrar con total impunidad. La comunidad financiera ve el secreo como natural, pero ¿para qué, entonces, promover la democracia?
Sería bueno aprovechar la situación para cambiar cómo funciona y cual debe ser su objetivo en este momento. Al principio fue creado para promover la estabilidad económica, pero ahora parece que su principal preocupación es servir a los intereses de la comunidad financiera: en realidad, ha promovida políticas, como la liberalización del mercado de capitales, que han acentuado la inestabilidad global. Es inadmisible que, a pesar de sus numerosos errores, se considere infalible. Y, siendo como es una institución pública, me parece inadmisibles su falta de transparencia; su obrar con total impunidad. La comunidad financiera ve el secreo como natural, pero ¿para qué, entonces, promover la democracia?
Sería bueno aprovechar la situación para cambiar cómo funciona y cual debe ser su objetivo en este momento. Al principio fue creado para promover la estabilidad económica, pero ahora parece que su principal preocupación es servir a los intereses de la comunidad financiera: en realidad, ha promovida políticas, como la liberalización del mercado de capitales, que han acentuado la inestabilidad global. Es inadmisible que, a pesar de sus numerosos errores, se considere infalible. Y, siendo como es una institución pública, me parece inadmisibles su falta de transparencia; su obrar con total impunidad. La comunidad financiera ve el secreo como natural, pero ¿para qué, entonces, promover la democracia?

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