El jurado ya tiene el objeto de veredicto por la muerte de Leónidas Vargas
En unos días se conocerá el fallo en el que se decidirá si los siete acusados son culpables del asesinato del 'narco'
El jurado que debe decidir si los siete acusados de asesinar al narcotraficante Leónidas Vargas en el hospital Doce de Octubre ya tiene el objeto de veredicto. Es decir, desde las tres y media de la tarde, disponen del listado de preguntas que tendrán que responder para emitir el fallo en los próximos días.
No hay plazo para las deliberaciones del jurado, pero se prevé que en dos o tres días se conozca si los siete acusados son culplables. Tendrán que responder si Jonathan Andrés Ortiz fue autor material de los disparos que mataron al narcotraficante colombiano el 7 de enero de 2009 mientras se encontraba ingresado en el hospital por una enfermedad. Se le acusa de un delito de atentado agravado por el uso de un arma de fuego. La fiscalía solicita para él 27 años de cárcel. El jurado deberá decidir si el principal acusado carecía, además, de licencia de armas.
Otro de los imputados es José Jonathan Fajardo de 29 años. El jurado tendrá que decidir si era el jefe que organizó y encargó el asesinatos a Jonathan Andrés Ortiz a cambio de un precio.
El día que Leónidas Vargas murió de cuatro disparos, dos personas entraron en el hospital Doce de Octubre, con las caras tapadas, y llegaron a su habitación, como se ve en un vídeo de las cámaras de seguridad del centro médico. Una se encargó de disparar, mientras otra vigilaba. El jurado tendrá que decidir si el que vigilaba la habitación 543 era Jonathan Montoya Rendón, de 25 años.
El objeto de veredicto aclarará también si existía una oficina de cobro para los sicarios y qué imputados son culpables de asesinato.
El jefe de la Caquetá
Leónidas Vargas Vargas, de 59 años, alias El Viejo o Paras de Alicante, era el jefe del cartel de la Caquetá y estaba también relacionado con el cartel de Medellín. Fue detenido junto a su hijo y su yerno el 8 de julio de 2006 a la puerta de un hotel de Madrid con un pasaporte venezolano falso a nombre de José Antonio Ortiz Mora. Su captura estaba relacionada con la aprehensión de un alijo de 500 kilos de cocaína escondidos en el interior de un cargamento de piñas tropicales transportadas desde Panamá. En aquellos días, Colombia ofrecía cinco millones de dólares de recompensa por la captura de Vargas. En 2006, figuraba entre los 19 narcotraficantes más buscados de Colombia e incluso se le acusó de mantener fuertes vínculos con la guerrilla terrorista de las FARC. El juicio contra Vargas se retrasó por sus problemas pulmonares. El fiscal pedía para él 24 años de cárcel por narcotráfico. Tras su paso por las prisiones de Alcalá-Meco y Navalcarnero, su estado empeoró y consiguió la libertad provisional atenuada, lo que le permitía estar en arresto domiciliario. Su estado de salud le llevó a ingresar en el hospital.
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