El 'lehendakari' afirma que ETA "está derrotada"

El lehendakari Patxi López y el presidente del PP vasco, Antonio Bsagoiti, han recibido esta mañana el VII Premio de las Libertades Rafael Riego, en Tuña (Asturias), la aldea natal del general Riego, en la que López veraneó durante su infancia y juventud. Durante el acto, el presidente del Gobierno vasco ha afirmado que ETA "no sólo está más débil que nunca, sino que está derrotada" porque sabe que "nunca conseguirá nada con el terrorismo".

Basagoiti, por su parte, ha agradecido que el galardón les haya sido concedido por "la defensa de la libertad que sin duda ninguna vamos a alcanzar". El líder de los populares en el Páis Vasco, ha querido referirse a la propuesta que ayer presentó el PNV en la Cámara vasca, en la que instaba al lehendakari a que expresara su posición favorable a la legalización de Sortu. Basagioti ha recordado que la formación nacionalista "siempre ha estado en contra de todo lo que ha funcionado contra el terrorismo". También ha hecho alusión a la proposición presentada por los socialistas vascos de la que ha asegurado que "el PSE no la va a tramitar y punto". López, ha prferido no hacer declaraciones.

Antes de recibir el galardón, que tanto López como Basagoiti han dedicado a todos los vascos que defienden en libertad, ambos dirigentes se han acercado -acompañados, entre otros, por el presidente de Asturias, Vicente Álvarez Areces- hasta la casa natal del general Riego donde se ha interpretado el himno que lleva su nombre.

Con este acto, López y Basagoiti parecen poner fin a una semana plagada de desencuentros no sólo entre los dos socios de gobierno, sino en las propias filas del PSOE. La polémica se inció el martes pasado con la publicación en EL PAÍS de un artículo del presidente del PSE, Jesús Eguiguren , en el que criticaba la poca valentía del presidente del Gobierno con Sortu. Desde el Gobierno vasco, su portavoz, Idoia Mendia, quiso recalcar que la postura del Ejecutivo de López no coincidían con las opiniones de Eguiguren . El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, también quisó desmarcar la posición del Elecutivo de Zapatero de las palabras del dirigente vasco y recalcó que Sortu era ilegal, aunque debían ser los tribunales los que decidieran sobre su inscripción.

Al día siguiente el propio lehendakari en un acto en Madrir declaró que no había divergencias entre el PSOE y el PSE aunque recalcó que le "dolía que le dieran lecciones desde 500 o 1.000 kilómetros de distancia". Esa misma tarde los socialistas vascos presentaban una propuesta en el Parlamento para que la Cámara vasca manifestara su "deseo" de que Sortu pudiera "evidenciar" su legalidad, algo que no gustó nada entre las filas populares que obligaron al PSE a "postponer" la resolución hasta que el Tribunal Supremo decida sobre la nueva marca de la izquierda abertzale.