Hipnosis como anestésico
Odontólogos de toda España analizan en San Sebastián la aplicación de técnicas hipnóticas en personas con fobias o minusvalías
Habitualmente se relaciona la hipnosis con los espectáculos casi de magia transmitidos por televisión, en los que la víctima pierde la consciencia de forma aparente. Pero existe otro tipo de hipnosis, que ya es utilizada en España, y que ha sido analizada en el IX Congreso de Odontología para el Minusválido y Pacientes Especial, que se celebra hasta mañana en San Sebastián.
El doctor Christian Rauch, de la Sociedad alemana de Hipnosis Dental, impartió ayer un taller sobre las posibilidades de esta técnica en el tratamiento de pacientes con fobias y minusválidos, y para evitar la utilización de anestesia.
Según explica Rauch, en Alemania, son ya 15.000 los dentistas que utilizan la hipnosis, y varias las tesis universitarias que se han elaborado sobre esta sorprendente técnica, Este dentista utiliza desde hace 20 años la hipnosis en todo tipo de tratamientos, desde empastes y extracciones hasta intervenciones quirúrgicas de varias horas de duración. Para personas con fobia al dentista pero también como anestésico. "Existe un tipo de especial de hipnosis que permite evitar la anestesia, aunque lo normal es combinar la anestesia local y la hipnosis", precisa el doctor.
Esta técnica es aplicable al 90% de las personas. Hay que entender las explicaciones
"En estos tratamientos, el paciente no pierde la consciencia"
La mayoría de quienes acuden a su consulta presentan miedos y fobias a los tratamientos bucales. Durante su trayectoria profesional ha visto casos extremos como el de un paciente que, pese a tener un grave problema de salud dental, no acudía al dentista desde hace 20 años porque sentía auténtico pánico. ¿Y qué proceso se sigue para hipnotizar a sus clientes? "El fin de la hipnosis es conseguir que el paciente alcance un buen estado anímico durante el tratamiento. Intento que, aunque sea consciente de que está en la consulta, su mente se encuentre en otra parte reviviendo una experiencia positiva", señala. Para ello, el profesional busca la empatía con quien recibe el tratamiento. "Se trata de establecer un tipo de comunicación diferente, hacer que se sienta bien".
Rauch asegura que en ningún momento el paciente pierde el contacto con la realidad. "Eso sólo ocurre con un tipo de hipnosis que es para espectáculos, con la hipnosis médica, en la que es consciente de que recibe un tratamiento", señala.
Según explica, esta técnica es aplicable en el 90% de las personas. El único requisito imprescindible es tener la capacidad de entender sus explicaciones, lo que excluye a niños menores de tres años o a personas con deficiencias mentales severas, Rauch recomienda la hipnosis a cualquiera que vaya al dentista. Por experiencia, ha comprobado que todos los humanos, en mayor o menor medida, tienen miedo a estos tratamientos.
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