Miles de personas agradecen en la Puerta del Sol la ayuda prestada a las víctimas del 11-M

Miles de personas han participado este mediodía en la madrileña Puerta del Sol en el acto de homenaje organizado por la Comunidad de Madrid para agradecer su labor a todos los servicios públicos, el personal voluntario y los ciudadanos anónimos que trabajaron en las labores de auxilio y rescate de las víctimas del brutal atentado del pasado 11 de marzo.

La ceremonia ha comenzado con las doce campanadas del emblemático reloj de la Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, cuya fachada está cubierta con una gigantesca pancarta en la que se lee Gracias Madrid y que refleja imágenes de las actuaciones de los distintos servicios de emergencia el día del brutal atentado. A ambos lados, se han colocado seis desplegables con los nombres de los 190 fallecidos y los más de 1.900 heridos ese día. A sus pies, se situaban representantes de los 80 colectivos homenajeados en la tribuna principal del acto, frente a los cual se han sentado las autoridades madrileñas, encabezadas por la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, y el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.

En este homenaje, han estado bomberos, fuerzas de Seguridad del Estado, personal sanitario, de urgencias y de la funeraria, sacerdotes, psicólogos, Protección Civil, empleados de los transportes públicos, forenses, trabajadores de la limpieza, Ifema y todos los voluntarios e innumerables empresas privadas que "cumplieron con su deber aun poniendo en riesgo sus vidas", en palabras del periodista Carlos Herrera, presentador del acto. En la ceremonia, que se ha prolongado durante media hora, no ha habido discursos oficiales, únicamente las palabras de Herrera para destacar el "impecable" funcionamiento de todos los servicios y agradecer la "generosidad" que demostraron y que "en las circunstancias más difíciles antepusieran el deber de los demás al suyo propio".

Flores y esculturas

La interpretación del aria Lacrimosa, de Mozart, a cargo de la Orquesta y Coro de la Comunidad, ha dado paso a la proyección de un vídeo en dos pantallas instaladas en la plaza, que resumía aquel fatídico día en el que "la vida se detuvo en Madrid y estalló en mil pedazos". Después, Aguirre y Gallardón, además de los alcaldes de Alcalá de Henares, Torrejón de Ardoz, San Fernando de Henares y Coslada, en representación de todos los regidores de Madrid, han entregado a los colectivos una pequeña escultura de Fernando Capa que simboliza la solidaridad.

Herrera, que también sufrió una tentativa de atentado, ha pedido a todos que no olviden nunca "el día en que Madrid se convirtió en la capital del dolor y del horror" porque "unos terroristas intentaron acabar con su libertad". Para que ese olvido nunca se produzca y "generaciones venideras reflexionen sobre la matanza", se ha instalado una lápida, a la izquierda de la puerta principal de la sede del Gobierno. Bajo el título Madrid agradecido, en la placa recién se lee el texto: "A todos los que supieron cumplir con su deber en el auxilio a las víctimas de los atentados del 11 de marzo de 2004 y a todos los ciudadanos anónimos que les ayudaron. Que el recuerdo de las víctimas y el ejemplar comportamiento del pueblo de Madrid permanezcan siempre".

La presidenta y el alcalde de Madrid han depositado una corona de flores debajo de la lápida mientras sonaban los acordes del Réquiem Aeternam, también de Mozart y han saludado uno por uno a los representantes de los servicios públicos. A este homenaje, para el que se habían colocado 3.000 sillas, han asistido, entre otros, el delegado del Gobierno, Francdisco Javier Ansuátegui, los portavoces de los grupos parlamentarios de la Asamblea -Antonio Beteta (PP), Rafael Simancas (PSOE) y Fausto Fernández (IU)-, así como de la oposición municipal de la capital, Trinidad Jiménez (PSOE) e Inés Sabanés (IU). Las miles de velas y mensajes depositados junto a la fachada principal de la Real Casa de Correos han sido trasladados a la estación de Atocha para poder montar los escenarios.