España aprueba ayudas por 390 millones de euros en la cumbre con Marruecos

España y Marruecos cierran hoy en Marraquech la época más tenebrosa de sus relaciones diplomáticas con una cumbre de sus jefes de Gobierno que pocos avances sin embargo permite augurar. El presidente del Ejecutivo español, José María Aznar, y el primer ministro marroquí, Driss Jettu, se reúnen desde las seis de la tarde en el hotel La Mamunia, como estación previa al encuentro que debe escenificar mañana este acto de conciliación entre el mandatario español y el rey Mohamed VI.

Exceptuando los episodios bélicos entre ambos países, éste ha sido sin duda el trienio más negro en las relaciones hispano-marroquíes. El detonante de la crisis fue la afirmación hecha por Aznar de que la negativa de Marruecos a seguir abriendo sus aguas a la flota española no podía "dejar de tener consecuencias". La respuesta marroquí deterioró los lazos diplomáticos, hasta el punto de que Rabat retiró su embajador en Madrid en octubre de 2001. En julio del año siguiente se produciría el enfrentamiento en torno al islote de Perejil, que propició la intervención como mediador de Estados Unidos.

El escollo del Sáhara

Sin embargo, saldadas estas cuentas, el principal escollo que encuentran las relaciones entre Madrid y Rabat se centra en el conflicto del Sáhara occidental. España ha reiterado varias veces su compromiso con el Plan Baker de Naciones Unidas, un plan descolonizador al que Marruecos se opone tajantemente. Mohamed VI lo dejó clarísimo el viernes: la única salida posible al conflicto es "la reintegración territorial de Marruecos", esto es, el mantenimiento del territorio bajo plena soberanía marroquí. Sin embargo, la ONU y las demás partes implicadas en el conflicto (el Frente POLISARIO y Argelia, principalmente), defienden el plan del enviado norteamericano. No obstante, ninguna de las partes se ha cerrado al diálogo y a la búsqueda de soluciones intermedias.

En este sentido, el Gobierno marroquí, según ha anunciado antes de la reunión el ministro de Exteriores, Mohamed Benaissa, confía en que España asuma una labor de mediación con Argelia para lograr una solución "política, pacífica y negociada" al conflicto. "Espero que España pueda también hacer un esfuerzo para llegar a una solución política, pacífica, negociada, entre nosotros y los argelinos y terminar con este conflicto que ha durado mucho tiempo", ha dicho Benaissa.

Inmigración

Marruecos y España crearon tres grupos de trabajo tras la visita de Jettu el pasado mes de junio para tratar de acercar posiciones en los problemas derivados de una vecindad tan problemática. Sin embargo, pocos avances se han conseguido desde entonces. La principal preocupación del Ejecutivo español pasa por el problema de la inmigración; Madrid considera que Rabat se desentiende del control del tráfico de personas, una cuestión agravada por la falta de un acuerdo eficaz que permita repatriar a los subsaharianos indocumentados. Así las cosas, quizá el mayor avance que pueda lograrse en esta cumbre se refiera a la devolución de los menores marroquíes.

Una vez desmantelada la flota pesquera que faenaba en aguas de Marruecos, los problemas económicos ligados al mar tienen su foco de tensión en la delimitación de la frontera entre Canarias y Marruecos y el reparto de ese territorio (muy importante por la presencia potencial de hidrocarburos). España quiere además realizar avances en la cooperación económica, y presenta de nuevo un programa de inversiones de más de 400 millones de euros que ya ha sido recibido con fuertes reticencias en otras ocasiones.

Programa de reuniones

La VI Reunión de Alto Nivel (como se denomina a esta cumbre en el Tratado de Amistad firmado en 1991) debería haberse realizado hace tres años. Ambos países se dieron cita, una vez aceptadas las tensiones anteriores como "malentendidos ampliamente superados" (como dijo Jettu en junio), para mediados de octubre, pero las complicaciones que aún perviven a nivel diplomático han obligado a retrasar la cita hasta ahora. En el encuentro participan también ocho ministros (Exteriores, Economía, Interior, Justicia Fomento, Educación, Trabajo y Agricultura), que mantendrán reuniones paralelas a las de Aznar y Jettu. El encuentro culminará con la reunión entre Aznar y el monarca alauí, Mohamed VI.