Imanol Arias recibe el premio a su trayectoria en el Festival de Cine Español de Málaga

Imanol Arias ha celebrado esta noche su 47 cumpleaños con la recogida del Premio Málaga del Festival de Cine Español en reconocimiento a toda su trayectoria, acompañado de algunos de sus amigos de esta profesión, y con una enérgica defensa del oficio tras las críticas de los últimos meses.

En una gala celebrada en el Teatro Cervantes y conducida por Ana Belén, al subir al escenario el actor ha recibido una ovación durante varios minutos del público que, puesto en pie, le cantaba el Cumpleaños feliz, mientras que él le correspondía, rodilla en tierra, con un brindis al estilo torero. Durante su intervención, Imanol ha manifestado que el cine "es un arte peculiar, que ha pasado de ser mudo a ser sonoro, del blanco y negro al color y de lo abstracto al realismo", pero dentro de la gran maquinaria que es una película de hoy, "en última instancia" los actores son "los encargados de plasmar la idea del director".

Por eso, se ha confesado "orgulloso de ser actor", una profesión en la que "nadie es de fiar", porque están "todos locos", aunque se mantiene un gran sentido de la amistad, y "un actor es el mejor amigo que uno puede tener". En la parte más combativa de sus palabras, Imanol ha exigido "el más profundo respeto al cine español, y que no se le abandone, porque no lo vamos a permitir", puesto que este arte sustenta "nuestra lengua, que es nuestra patria, y ésta empieza en Irún, sigue por Buenos Aires y llega casi hasta San Francisco".

"Ni vagos ni parados"

"Esto no puede recibir insultos, porque no lo hacen subvencionados, vagos ni parados, lo hacen artistas y españoles", ha advertido el actor, que recogía de manos de Ana Belén la Biznaga de Plata que simboliza el Premio Málaga. Antes de aparecer Imanol sobre el escenario, lo han hecho las actrices Ana Duato y María Galiana, sus compañeras en la serie Cuéntame, los directores Vicente Aranda e Imanol Uribe y la también actriz y presidenta de la Academia del Cine, Marisa Paredes, que han recordado sus vivencias junto al homenajeado.

Así, Duato ha señalado que hablar de Imanol "es hablar de un grande" y que ella tiene la "suerte de aprender cada día de él", y Galiana ha asegurado que al trabajar con el actor "he descubierto su manera franca, sincera y desahogada de acercarse al personaje y realizarlo, hacerlo real".

Por su parte, Aranda, que le ha dirigido en cinco películas, ha apuntado que es "algo más que un actor, porque he estado en algunas manifestaciones cerca de él" y le gustaban sus eslóganes, mientras que, Imanol Uribe, que sólo trabajó con Arias en La muerte de Mikel (1983), ha destacado "su valentía en su trabajo y también en su ha admitido con una actitud encomiable frente al terrorismo de ETA". Por último, Marisa Paredes admitió que siempre pensó "que llegaría lejos", pero que nunca imaginó que tanto" y le ha agradecido su "generosidad al entregarse a lo que hace".