Hacer un MBA ‘online’ supone un aumento salarial de un 33,7 % de media y es clave en la empleabilidad

Para nueve de cada 10 alumnos que completan un máster online en el campo de la Administración y Dirección de Empresas (ADE), los beneficios no se hacen esperar y son evidentes: el 92,7 % de los egresados encuentra trabajo en apenas cinco semanas, y además lo hacen con una subida salarial del 33,7 % a nivel global (de 25.085 a 33.145 euros de media, en el caso de España). Así, al menos, se desprende del último Ranking de Formación Superior Online (FSO) elaborado por la consultora de investigación de mercados Hamilton y Emagister: una lista que encabeza, por séptimo año consecutivo, la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), y que incluye 18 universidades españolas entre las 30 mejores instituciones de educación online a nivel global en habla hispana.

A la UOC le siguen, en el Top 10, la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), en segundo lugar; la OBS Business School (tercero); ESIC Business & Marketing School (cuarto); el Instituto Europeo de Posgrado (séptimo); la Universidad de Nebrija (octavo); La Salle (noveno) y La Escuela Universitaria Real Madrid (10º). En la presente edición del estudio, se ha examinado a 200 instituciones de España, Estados Unidos, México, Puerto Rico, Argentina, Colombia, Guatemala, Perú y Panamá, en 120 indicadores agrupados en tres categorías diferentes (institución, actores y formación) que son reevaluadas año a año, y por medio de encuestas a los responsables de programas de los centros educativos y a más de 4.000 estudiantes y egresados.

La mayoritaria presencia de centros españoles se explica por un conjunto de factores que van desde la oferta formativa a la aplicación de metodologías efectivas, la calidad de la docencia y la experiencia positiva de los propios estudiantes. “España tiene una larga tradición de excelencia académica, y muchas de las primeras instituciones de educación superior online se iniciaron en este país, siendo pioneras en el desarrollo de nuevas ideas y disciplinas”, sostiene Sebastián Fernández de Lara, socio director de Hamilton. Y pone como ejemplo a la UOC, que encabeza el ranking: “La UOC ha sido pionera en el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para la educación superior, y ha desarrollado una serie de programas innovadores que se adaptan a las necesidades de los estudiantes”.

El impacto de la inteligencia artificial

Una de las novedades del ranking de este año ha sido la incorporación de herramientas de inteligencia artificial para perfeccionar tanto el análisis como la integración de los datos y las diversas fuentes, y obtener así indicadores más exactos. El uso del Procesamiento de Lenguaje Natural, una rama de la IA, se he empleado para transformar opiniones y comentarios cualitativos en datos cuantificables.

Pero el impacto de la IA se deja notar también en la naturaleza de los MBA que están llamados a ser más relevantes en 2024, una vez que el año que termina, 2023, ha sido sin duda el de la inteligencia artificial. Por ejemplo, una institución, Inesdi, se hizo hueco en el Top 30 de FSO con un máster en IA para la transformación de negocios. “La IA ha creado nuevas oportunidades de empleo para ingenieros, científicos de datos y otros profesionales con habilidades tecnológicas, pero también está creando oportunidades de empleo en campos no tecnológicos: se está empleando para apoyar a los estudiantes en el aprendizaje, para asistir en la reestructuración empresarial o mejorar la experiencia del cliente”, esgrime Fernández de Lara. Un impacto que, además, seguirá creciendo en el futuro, por su relevancia a la hora de automatizar tareas repetitivas y rutinarias, “permitiendo a los profesionales ADE centrarse en actividades estratégicas y de valor, mejorar la eficiencia y optimizar los procesos empresariales”, añade.

La novena edición del Ranking FSO arroja además otros datos interesantes, como son el aumento de las mujeres entre quienes optan por estudiar un MBA, que ha crecido seis puntos desde 2018 hasta alcanzar el 44,9 % del total; y un perfil de alumno más joven, ya que la edad media se sitúa en 36,7 años, frente a los 39,9 de 2022.

¿Por qué estudiar un MBA ‘online’?

La conciliación profesional y familiar sigue siendo la principal motivación de los alumnos a la hora de optar por la educación en remoto: así, el 73,2 % de los estudiantes encuestados sostiene haberlo hecho para compaginar trabajo y estudios, mientras que el 13,5 % indica hacerlo para conciliar familia y estudios. Una tendencia que demuestra el interés por buscar una solución que les permita seguir formándose sin por ello tener que dejar de trabajar o atender a su familia.

No obstante, la formación online en el ámbito empresarial presenta también otras fortalezas, como por ejemplo el papel activo del estudiante, la actualización de los materiales, el networking con personas que están a miles de kilómetros y el fomento de destrezas relacionadas con el trabajo autónomo, la gestión del tiempo o la flexibilidad. El uso de plataformas digitales en este tipo de programas de posgrado suele tener, además, un impacto positivo en los estudiantes, reforzando su nivel de autodisciplina.

Ahora bien, ¿realizar un máster sigue siendo opcional o, por el contrario, se ha convertido en una obligación implícita que impone el mercado? Fernández de Lara rechaza este extremo, si bien reconoce la importancia de la formación continua para crecer en un entorno profesional cada vez más competitivo y cualificado. “La decisión de realizar un máster ADE debe basarse en una evaluación individual de las metas profesionales, las preferencias personales y el contexto específico del mercado laboral en el que se encuentra cada uno”, recuerda. “Por eso mismo, es recomendable investigar las oportunidades de trabajo en el área en que se quiere crecer, hablar con profesionales del sector y repensar cómo puede contribuir el máster a tu crecimiento y éxito laboral”.

Habilidades más demandadas en ADE

A juicio del socio director de Hamilton, las competencias más demandadas son una mezcla de habilidades analíticas (es decir, la capacidad para analizar datos financieros y económicos) y de habilidades de comunicación, presentación y negociación, para trasladar los mensajes de forma efectiva. Pero también destaca el liderazgo para conducir y motivar los equipos, sobre todo en los puestos de dirección, y el conocimiento técnico de las nuevas tecnologías: “Es crucial que los profesionales de ADE adquieran capacidades específicas que les permitan capitalizar los beneficias de la IA y, a la vez, comprendan los riesgos asociados de la tecnología”, advierte.

Para formar parte del Ranking FSO elaborado por Hamilton y Emagister, las instituciones educativas han de ofrecer másteres en el ámbito de la administración y/o gestión de empresas en español, con un mínimo del 70 % de la docencia en formato online y al menos una antigüedad de cinco años impartiendo dicha formación.

FORMACIÓN EL PAÍS en X y Facebook

Suscríbase a la newsletter de Formación de EL PAÍS