Conpymes y Pimec presionan para que Junts frene la reducción de jornada en el Congreso

Más de un centenear de pequeños y medianos empresarios pertenecientes a dos de las organizaciones de pymes con mayor presencia en Cataluña, Conpymes, y dentro de esta, Pimec, se han puesto en pie de guerra contra el proyecto de ley para reducir la jornada laboral máxima legal a 37,5 horas, que ahora está en tramitación parlamentaria. Para asegurarse de que su mensaje llega al Congreso y, sobre todo, a Junts, que es la formación más reticente a permitir que esta norma salga adelante, se han trasladado a Madrid donde han celebrado este martes una cumbre empresarial en contra del futuro recorte horario, que ha tenido como lema: “Así no”.

José María Torres, presidente de la Confederación Nacional de Pymes (Conpymes) —patronal a la que pertenece Pimec y que fue apadrinada en su origen por la propia vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz a la que ahora reprochan cómo quiere recortar la jornada— insistió este martes en que desde Junts le han confirmado que los nacionalistas catalanes votarán en el Congreso en contra de la ley de recorte del tiempo de trabajo.

Si bien, acto seguido, Torres descartó la posibilidad de viajar a Waterloo (Bélgica) para ratificar este compromiso por boca del propio Carles Puigdemont, pero advirtió a Junts que Conpymes confía en que esta cuestión “no sea moneda de cambio para otra cosa en el Congreso, que ya sabemos como funciona y a veces a cambio de otra cosa se vota (a favor) algo”. En cualquier caso, el dirigente empresarial aseguró que Copymes “se va acentrar en que el recorte de la jornada no se apruebe y si lo hace, habrá que intervenir en el periodo de enmiendas; lo que no sería muy bueno para las empresas”.

Según recoge el manifiesto aprobado en esta cumbre empresarial, la norma de recorte del tiempo de trabajo “no es solamente una reducción de la jornada hasta las 37,5 horas” sino que también pretende crear un nuevo registro de jornada, “que supone una vulneración del derecho a la libertad de empresa, a la privacidad y, al mismo tiempo, conlleva una presunción implícita de incumplimiento empresarial en materia de jornada que es inadmisible”, señalan los firmantes. Junto a ello critican que la ley persiga también “reforzar el derecho a la desconexión digital, con el derecho del trabajador a no estar localizable fuera de su horario de trabajo; y cambiar el régimen sancionador, multiplicando la cuantía de las sanciones”.

Asimismo, estos pequeños y medianos empresarios catalanes critican que la ley “tampoco tiene en cuenta la flexibilidad con la que trabajan las empresas más pequeñas y los autónomos, en muchos casos negocios familiares, lo que dificultará la implantación del sistema de seguimiento de la jornada de 37,5 horas. Y no hacerlo llevará aparejadas multas muy elevadas de hasta 10.000€ por trabajador, una decisión que cambia radicalmente las sanciones que se aplican ahora, que son por empresa y no llegan a 7.500 euros”.

A pesar de coincidir con CEOE-Cepyme en el rechazo a esta futura normativa, Torres ha descartado hacer frente común con la gran patronal. “A quien representa CEOE es a las grandes empresas del IBEX y no quieren que las pymes tengan voz propia; no hay más que ver lo que está pasando con las elecciones en Cepyme, lo único que quieren es controlar esa organización”, que ha calificado de “apéndice” de la gran patronal. Y ha criticado que CEOE quiera “tomar el control de Cepyme cuando hay alguien que tiene voz propia como (es el caso de su presidente Gerardo) Cuerva.

Representatividad de las pymes

Precisamente para reivindicar el papel de las pymes en el diálogo social, en esta cumbre también ha intervenido el vicepresidente primero de Conpymes y presidente de Pimec, Antoni Cañete, quien ha recordado a la ministra Yolanda Díaz que la ley respalda que las organizaciones empresariales más representativas a nivel autonómico formen parte del Consejo Económico y Social (CES). Según esto, tanto Pimec como PIME Balears deberían entrar en este órgano consultivo del Gobierno donde se someten a análisis y votación todos los proyectos de ley que luego se tramitan en el Parlamento. Es más, Cañete ha advertido que no cumplir con la incorporación de estas patronales al CES “sería prevaricar”.

Preguntado por si se siente traicionado por Díaz, por no haberlos incluido aún en el CES, Cañete negó este punto, pero dijo su organización “seguirá haciendo presión para que se haga lo antes posible, a ver si fuera este año”. De momento, Conpymes ya ha sido nombrado miembro del Consejo Estatal de la Pyme y Pimec debería entrar en la Comisión Nacional de Convenios Colectivos. En cuanto a su participación directamente en las mesas del diálogo social nacional concluyó: “Estamos intentando que se cumpla el plan normativo del Gobierno, que habla de aprobar la normativa que regule la representatividad de las pymes”.