La creación de empleo se interrumpe en julio tras cinco meses aunque el paro cae al menor nivel en 16 años

Un buen primer semestre del empleo ha dejado paso a un mes de julio con buenas y malas noticias para el mercado laboral. La Seguridad Social perdió 9.783 empleos el mes pasado, interrumpiendo cinco meses consecutivos de saldos positivos y dejando la cifra total de cotizantes en 21.383.106 trabajadores. Sin embargo, el número de parados registrados inscritos en las oficinas de los servicios públicos de empleo también cayó en julio en 10.830 personas, lo que suma el sexto mes consecutivo de descensos y deja la cifra total de desempleados en 2.550.237, la más baja en 16 años, según los datos facilitados este viernes por el Ministerio de Trabajo.

Dicho esto, lo más preocupante de las cifras conocidas este viernes es que la destrucción de empleo en julio no es algo habitual. En toda la serie histórica facilitada por la Seguridad Social que empieza en 2002, solo hubo caída de cotizantes en julio de 2022. Entonces se perdieron 7.366 puestos, lo que significa que el dato conocido este viernes es el peor en dicho mes en todo el registro. Es más, el año pasado se crearon en julio casi 22.000 puestos de trabajo y creación media de empleo en este mes durante la anterior etapa de recuperación del mercado laboral (2014-2019) superó los 52.000 nuevos puestos.

Las razones de este pinchazo experimentado por la ocupación en julio se encuentran fundamentalmente en dos sectores con peor comportamiento. En primer lugar se ha registrado una fuerte pérdida de 122.551 afiliados en el sector de la educación debido a la interrupción del curso académico por las vacaciones de verano. Y, en segundo lugar, se ha producido también una intensa caída de los trabajadores que cotizan en el Régimen Especial Agrario, que perdió 39.000 cotizantes.

De esta forma, sin dicha pérdida de empleos en el campo —y sin la destrucción también de 4.462 afiliadas al Régimen Especial del Hogar que se registró en julio— el Régimen General, que agrupa a todos los asalariados y concentra a ocho de cada diez cotizantes, ha ganado en julio casi 37.000 afiliados y roza ya la cifra nunca conocida en el sistema de 18 millones de trabajadores.

Así, el mes pasado hubo actividades con un excelente comportamiento en materia de empleo, como la sanidad, donde las sustituciones y contrataciones para las zonas de mayor turismo han generado casi 50.000 nuevos empleos. También el comercio, animado por la temporada estival, ha registrado 44.473 afiliados más. Y otras actividades como las de la administración pública (14.585 cotizantes más); los trabajos administrativos (12.406); la hostelería (11.235 empleos más) e incluso la industria (con 7.433 más) mantuvieron cierto dinamismo, aunque esta última, con menos vigor de lo habitual en julio.

De hecho, el buen comportamiento que ha venido teniendo el mercado de trabajo este año se ve, en parte, reflejado también en los datos desestacionalizados del mes de julio, que son los que destaca el Gobierno. Así, las cifras que facilita con más detalle la Seguridad Social apuntan que el empleo, según estos datos corregidos de las variaciones estacionales, creció el mes pasado en 1.335 cotizantes, acercando la cifra de afiliados a los 21,2 millones de trabajadores, tras sumar 51 meses ininterrumpidos de ganancias de ocupación. Aunque, según esta medición, la creación de empleo estaría aflojando respecto a meses y años anteriores, lo que genera la incógnita de si la ocupación aguantará el tirón en la segunda mitad del año.

No obstante, entre las sombras detectadas en el registro de Seguridad Social el mes pasado está una importante pérdida de afiliación femenina, con 62.356 mujeres menos cotizando que en junio, frente a un aumento de los cotizantes masculinos de 52.573, posiblemente por la fuerte presencia de mujeres en el sector educativo. Por el contrario, la mayoría de quienes abandonaron las listas del paro fueron mujeres (6.459) mientras que el paro juvenil apenas se redujo en 210 personas respecto a junio, pero sumó 39 meses de caídas y volvió a marcar un nuevo mínimo histórico de 174.926 menores de 25 años en el paro.

En cuanto a la calidad de la contratación, en julio ha repuntado el número de contratos, especialmente los temporales, algo normal por tratarse de un mes de la temporada estival. Así, se han registrado un 10% más de contratos: los fijos han crecido un 3,72% frente a un mayor incremento de los eventuales, del 15%. Esto ha llevado a que el peso de los indefinidos en el total de la nueva contratación haya descendido ligeramente al 38,7% de las nuevas firmas, cuando durante todo el año este porcentaje ha superado el 41%. Si bien, dentro de los 21.122 nuevos contratos fijos de julio, la mayoría (13.616) fueron a tiempo completo; le siguieron los celebrados a tiempo parcial (5.501) y los fijos discontinuos (2.006).

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