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Todas las comunidades recuperarán este año el PIB prepandemia

Asturias y Extremadura serán las últimas dos economías autonómicas en volver a los niveles de 2019, según Funcas

Ley de Turismo en Baleares
Turistas pasean por Palma.CATI CLADERA (EFE)
Laura Delle Femmine

Todas las comunidades recuperarán este año el PIB que tenían antes de la pandemia. Así lo estima Funcas, el centro de análisis de las cajas de ahorro, en su último informe de previsiones sobre las economías regionales. Según el estudio anterior, en 2023 había todavía siete territorios que se habían quedado por debajo de los niveles de 2019: Cataluña, Extremadura, Castilla y León, Cantabria, Asturias, Baleares y Canarias. Las últimas dos autonomías en volver a las cotas de 2019 serán Asturias y Extremadura, ha detallado el director de Coyuntura Económica del organismo, Raymond Torres, en la presentación del documento. “Ya hemos borrado, en términos de PIB, el impacto de la pandemia”, ha añadido. Los dos archipiélagos, junto a Madrid, serán las autonomías que más crecerán este año, por encima de la media nacional, que la entidad fija en el 2,5%, una décima por encima de la previsión del Gobierno.

El turismo ha sido uno de los sectores más afectados por las restricciones a los movimientos impuestos durante la pandemia, y las comunidades más dependientes de ello fueron las más golpeadas: Baleares y Canarias. Sus economías se hundieron cerca de un 20%. También fueron las que más rebotaron tras levantarse los confinamientos, pero dada la fuerte caída han necesitado más tiempo para recuperar los niveles de 2019. De cara a este año, Funcas estima que el PIB balear avanzará un 3,5%, y un 2,5% el canario. Madrid, por su parte, se apuntará un 2,6%, seguida por Aragón (2,5%) y Cataluña (2,5%). En el otro extremo se situarán Asturias y La Rioja (1,9%).

El Instituto Nacional de Estadística (INE), el organismo que difunde los datos de contabilidad nacional, todavía no ha publicado la información desglosada del crecimiento del PIB de las comunidades ni de 2023 ni de 2024. Del 2,5% que avanzará la actividad este año, según las previsiones de Funcas, 2,1 puntos procederán de la demanda interna, gracias “a la aceleración del consumo privado y también a la evolución de la formación bruta de capital fijo”, ha resumido Carlos Ocaña, director del organismo, en la presentación del informe. Las otras cuatro décimas llegan del sector exterior. “Un resultado sólido”, ha añadido el economista, “que refleja una buena evolución del turismo”. La inversión en vivienda y en bienes de equipo, en cambio, sigue rezagada.

De hecho, el turismo, que apunta a un nuevo récord este año, es uno de los factores que más pesará en el crecimiento del PIB autonómico este año, aunque se espera que su impulso se irá frenando en el futuro. Otro elemento de peso en el desempeño de la economía regional es el sector de servicios de mercado y sus exportaciones, así como la demanda procedente de los fondos europeos, que tendrán impacto sobre todo en Madrid, Cataluña, Navarra y País Vasco. La fortaleza de la industria de los bienes de consumo y el sector automotriz también impulsarán la mejora de la actividad.

Torres también ha detallado algunos elementos de carácter estructural. Entre ellos, una cierta convergencia entre comunidades en términos de tasa de paro. La buena marcha de la economía tendrá su reflejo en el mercado laboral y el nivel de desempleo estará en 2024 por debajo de los niveles prepandemia en todas las comunidades, salvo en Navarra, y será inferior al doble dígito en hasta 10 autonomías —Aragón, País Vasco, Cantabria, La Rioja, Baleares, Cataluña, Galicia, Castilla y León, Madrid y Navarra—, frente al 11% que estima el Gobierno para el conjunto del territorio —y el 11,2% de Funcas—, muy por encima de la media europea. Y bajará de forma más marcada en las comunidades con tasas más elevadas de desempleo, como Andalucía, Canarias, Castilla-La Mancha y Extremadura, favoreciendo la convergencia.

Otro elemento estructural es el aumento generalizado de población gracias a la inmigración, que ha frenado el declive demográfico. Este factor tiene que ver con otra variable estructural: una tendencia a la convergencia entre territorios también en término de PIB per cápita, pero que se explica más por un aumento de la fuerza laboral que por una mejora de la productividad.

Inflación desigual

El último factor estructural tiene que ver con la inflación, que ha impactado de manera desigual en el territorio. Desde el inicio de la subida de precios en 2021 hasta junio de este año, el IPC ha avanzado un 19,1%, pero en algunas comunidades el alza ha sido mucho mayor: Castilla-La Mancha, Galicia y Castilla y León, por ejemplo, han sufrido un aumento de más del 20%, frente al 17,1% de Madrid o el 18,5% de Cataluña.

En estas variaciones puede haber influido el coste más elevado del transporte para alcanzar los destinos con más dispersión poblacional, así como una menor competencia en estos lugares. Sin embargo, estos diferenciales no se corresponden con la subida de los salarios, que ha sido más o menos homogénea en el territorio pues suele ir vinculada a convenios sectoriales. “Pero no nos precipitemos a decir que los ciudadanos de Madrid y Cataluña tienen más ventaja porque el IPC ha subido menos. La vivienda no se incluye en la cesta del IPC, y ha subido más en las grandes ciudades”, ha matizado Ocaña.

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Sobre la firma

Laura Delle Femmine
Es redactora en la sección de Economía de EL PAÍS y está especializada en Hacienda. Es licenciada en Ciencias Internacionales y Diplomáticas por la Universidad de Trieste (Italia), Máster de Periodismo de EL PAÍS y Especialista en Información Económica por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
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